

Secciones
Servicios
Destacamos
JESÚS P. DEL RÍO
Lunes, 19 de noviembre 2007, 14:08
Del orden de millar y medio de cabezas de ganado participaron en la feria 'de año' celebrada ayer domingo en la localidad de Tárriba, organizada por la Asociación de Jóvenes Ganaderos de San Felices, teniendo como escenario una amplia finca municipal ubicada en pleno corazón de la villa, que con este motivo recibió un aluvión de gente, como se pudo comprobar, apenas puestos los pies en la pradera donde tuvo lugar el evento, a rebosar de público y de ganado de todas las especies, la mayoría vacuno de razas cárnicas incluida la tudanca, la más admirada por los visitantes.
En uno de los laterales de la finca se asentaron, como es habitual en estas citas anuales, numerosos feriantes con sus correspondientes "stands" de productos típicos y de todo aquello que el lector pueda imaginarse, con una clientela femenina importante. A buen seguro que ninguna se fue de vacío del mercadillo. En unos prados situados próximos a la Casa Consistorial, sus propietarios les cedieron para aparcar coches, gratis además. No obstante, otros lugares públicos fueron ocupados por vehículos. También Guardia Civil y Protección Civil se encargaron de regular los estacionamientos.
Entre los asistentes se encontraba el presidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla, como siempre con sus albarcas e ijada en ristre, acompañado por el alcalde de San Felices, Antonio González Linares, caminando tras unas cabañas de ganado tudanco conducidas por los vaqueros hasta el recinto ferial.
Se repartieron entre los ganaderos participantes más de medio centenar de campanos, seis zumbas igual cantidad de campanillas de lujo y 70 trofeos de distintos tamaños y tipos. Miembros de la Asociación, entre ellos José Ramón Cuena, realizaron la entrega al final. El próximo sábado la entidad invita a una cena a todos estos ganaderos. Más de seis mil euros es el presupuesto de la feria, que cuenta con la colaboración económica del Ayuntamiento.
Transaciones
En el apartado de transaciones o ventas en mayor número de lo esperado las realizadas, entre ellas citar cinco vacas de primer cruce, de Cuena, comercializadas para Campoo, a 841 euros cada una; la misma cantidad, cinco vacas pardo alpinas de montaña, vendió Pilar Collantes, de Llanos, a 1.202 euros cada una, todas paridas, con crías. Las vacas de carne se pagaron a dos euros kilo/canal; los terneros pasteros a 400 euros unidad, y las terneras cruzadas, a 550 euros.
En cuanto al caballar, los potros quincenos, en torno a los 390 euros; las yeguas de abasto buenas, a 540 euros. En este capítulo citar los 1.803 euros que cobró por una potra Cuena, adquirida para Solares (Medio Cudeyo). En vacuno y caballar fueron los precios más repetidos. Concurrieron una treintena de cabañas de bovino, entre éstas varias de tudanco, como las de Maximiliano Laherra 'El Requeté', de Somahoz, y Rafael Mombilla, de Sopenilla. De caballar catorce manadas y de ovejas y cabras, media docena.
Inmersos en adquisiciones de animales estaban tratantes cántabros, como Uco, el de Matamorosa, quien compró de todo, Fidelín, el de Vargas, y Manolo, el del Valle de Mena, entre otros. Ninguno se fue de vacío para sus lares.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.