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REDACCIÓN
Miércoles, 5 de marzo 2008, 02:27
Efectivos del Grupo de Estupefacientes del Cuerpo Nacional de Policía y agentes de la Unidad de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han desarticulado una red de distribución de drogas que operaba preferentemente en La Rioja pero que tenía nexos en Cantabria en el transcurso de una operación antidroga que fructificó gracias a una entrega controlada.
La Policía, que presentó la 'Operación Natalia' recientemente, ha detenido a tres personas de origen colombiano: Luz Piedad R.H. de 34 años, domiciliada en Santander y encargada de recoger en la oficina de Correos el 'paquete' con la droga (cocaína) para su traslado posterior a Logroño; y el matrimonio compuesto por Rigoberto C.M., de 43 años, y Alenis Adriana T.M., de 32, -alias 'Natalia'- que son los verdaderos importadores de la droga. Además, se ha incautado de 510 gramos de cocaína de notable pureza.
Según explicó la Jefatura Superior de Policía, la operación se puso en marcha cuando Vigilancia Aduanera detectó un paquete que contenía una indeterminada cantidad de cocaína y que tenía como destino Santander.
Con el consentimiento del Juzgado de Madrid, efectivos de Vigilancia Aduanera y del Grupo de Estupefacientes del Cuerpo Nacional de Policía de Santander organizaron una 'entrega controlada' que les llevó hasta la receptora del paquete -Luz Piedad R.H.- que no era la destinataria pero sí la encargada de recogerlo y llevarlo a Logroño, un 'trabajo' por el que Rigoberto C.M. y Alenis Adriana ('Natalia') iban a pagarle 2.000 euros.
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