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El autor, con su libro de 638 páginas. / SE QUINTANA
«Lo fácil es comunicar mucho para luego no decir nada»
MIGUEL DEL RÍO PERIODISTA Y AUTOR DEL LIBRO 'MANUAL PARA COMUNICAR BIEN. ¿VAS A PUBLICAR LO QUE TE HE ENVIADO?'

«Lo fácil es comunicar mucho para luego no decir nada»

«Muchos interesados dicen que los medios son culpable de la falta de confianza que hay, por dar las noticias como suceden»

JOSÉ LUIS PÉREZ

Domingo, 2 de noviembre 2008, 02:55

- De la edición de un libro que aconseja sobre cómo 'comunicar bien' se deduce que en muchos casos no se 'comunica' adecuadamente.

- Cada vez se comunica peor. Muchos piensan que con mandar la nota de prensa, ya basta. Hay que hacerlo bien y convencer primero al periodista al que se la envías. La seriedad es muy importante en el trabajo de comunicar. Está en juego la credibilidad y eso se construye poco a poco. Lo fácil es comunicar mucho para luego no decir nada, pero calar en la opinión pública cada vez que alguien sale en el periódico o habla en la radio o la televisión, ese es otro cantar.

- ¿A quién está dirigido este libro?

- A todo aquel que le guste la comunicación. Sin comunicación no vendes nada. Cogiendo una frase prestada de un periodista, lo que no sale en los medios de comunicación, no existe. Hoy las empresas cogen primero a jóvenes que saben idiomas, que se manejan bien con las nuevas tecnologías pero, sobre todo, se saben desenvolver y comunicarse. Ahora, los jóvenes saben de muchas cosas, pero no saben redactar una simple carta, ¡qué pena!

- ¿Cuánto tiempo le ha llevado el trabajo de elaboración?

- No me lo recuerde. Este libro lo inicie para tenerlo concluido en seis meses y me ha llevado dos años. Dentro de él hay además aportaciones de profesionales de Cantabria a los que he pedido también su opinión. Le voy a reconocer una cosa, al principio pensé en hacerlo con periodistas y jefes de prensa de ámbito nacional, pero Cantabria, de las muchas cosas buenas que tiene, cuenta con magníficos periodistas y profesionales de la comunicación. No es ni peloteo, ni gremialismo, es la pura verdad. De hecho, déjeme que le diga otra cosa, este libro se lo he dedicado «a todos los compañeros y compañeras que ya no están entre nosotros».

- ¿Cómo percibe la sociedad actual la información que recibe en el día a día de los diferentes medios de comunicación?

- Actualmente, con mucha preocupación. Imagínese, desde los medios de comunicación les estamos alertando de que el mundo, como lo conocemos hasta hoy, dicen que va a cambiar. Que si la crisis, que si los bancos, que el empleo... Muchos interesados dicen que los medios son culpable de la falta de confianza que hay, por dar las noticias como suceden. No es verdad, los medios y sus periodistas saben por regla general cómo hay que informar responsablemente en los malos momentos. Quizás algunos lo que quieren es que no se cuenten las cosas como son y exista desinformación.

- ¿La información llega muy filtrada en ocasiones por los interesados?

- La filtración de una buena noticia tiene sus pros y sus contras. Va a un solo medio, generalmente al más fuerte y con más audiencia y poder de opinión. Otros medios, lo ven mal. Pero la filtración siempre tiene la contraprestación de que la noticia que quieres dar aparece tan bien como lo has imaginado. Una buena comunicación no debe nunca dejar este recurso periodístico de lado. Hay que saber en todo momento qué medio me puede dar mejor algo que va a tener una gran repercusión política, social, económica, para mi ciudad o mi pueblo.

- ¿Internet es tanta revolución como en su día fue la imprenta, la prensa, la radio y la televisión?

- Internet lo ha cambiado todo. Creo que es la mayor revolución. Eso de que le des con el a un ratón de ordenador y veas lo que pasa en cualquier parte del mundo, a la hora que te de la gana, no tiene comparación. No le digo ya nada del correo electrónico, es el mejor invento en años. Lo peor de Internet es el mal uso que se le da por unos pocos; estar abierto a tanta opinión y participación origina también mucho insulto, calumnia y mentiras. Si en la vida hay poca educación, en Internet empeora, lo que te obliga a tener cuatro ojos con los chavales y el uso que puedan hacer de la Red.

- ¿España se encuentra en la misma situación en materia de comunicación que otros países europeos similares?

- Mejor, es mejor. El periodismo que se hace aquí en periódicos, es muy bueno. El de la radio, magnífico. El que menos me gusta es el que se hace en las televisiones, especialmente por la 'telebasura'. Es un mal ejemplo para los chavales que sólo sueñan con tener su minuto de oro en televisión. Por la televisión pasan muchos personajes con los que no se debiera contar, ni mucho menos pagar, porque no son ejemplo de nada.

- ¿Y las empresas, saben transmitir adecuadamente, en líneas generales, su trabajo?

- Las grandes sí. Las medianas y pequeñas están en el empeño. Lo que más ha espabilado a las empresas con respecto a la comunicación ha sido Internet. Antes iban a su aire en materia de comunicación; ahora van con los tiempos, y los nuevos tiempos son rápidos y cambiantes en todo y saben lo mucho que se juegan en ello.

- ¿Cree que el lector, oyente o televidente valora las exclusivas de los medios?

- Sí, apañados van los medios que no intenten dar informaciones en exclusiva, bien trabajadas y presentadas. Para los medios de comunicación debe ser algo así como un compromiso permanente, les da mucho prestigio, y además los lectores, oyentes y televidentes te premian con su fidelidad y contando por la calle que lo ha dicho tal periódico o tal emisora de radio.

- ¿Cómo ve el futuro de los diferentes medios de comunicación?

- Su pregunta tiene varias respuestas. Veo futuro, pero hay que renovarse constantemente. Internet nos ha puesto las pilas a todos. Es rápido, inmediato y participativo a tope. Pero creo que los demás medios, especialmente los periódicos, están sabiendo amoldarse a esta nueva situación con buenas iniciativas que tienen como referente al lector. Hoy, en general, todos los medios son más abiertos desde el punto de vista de que la audiencia tiene muchos canales de participación y a la carta. Quien no lo sepa ver así, no subsistirá.

- ¿A la juventud también le interesa estar informada?

- Sí, y les interesa mucho la comunicación. En mis clases de comunicación siempre les digo dos cosas: que no hay peor cosa que ser joven, cenar con tu pareja y dedicarte sólo a comer, sin hablar. Y la segunda es que, se dediquen a lo que se dediquen, para aprender a hablar y soltarte es imprescindible estar informado de lo que pasa a tu alrededor. Saber las últimas noticias, lo mismo te socorre en un cóctel que en una entrevista de trabajo.

- En el plano profesional, ¿le agrada más trabajar en el gabinete de prensa de una institución pública o añora volver a la primera línea informativa?

- La primera línea es muy dura. Me compensa poder escribir en el periódico u opinar en las tertulias de radio y televisión. Yo lo hago y me encanta.

- ¿Mantiene lo de que una imagen vale más que mil palabras?

- ¡Síííííí!

- ¿Es capaz de pasar un día sin leer un periódico, ver la tele, oír la radio o entrar en Internet?

- No, el 'mono' me puede.

- ¿Y en el tiempo libre qué le gusta hacer?

- Decirle por ejemplo a uno de mis hijos que venga conmigo a dar un paseo por el Parque de Las Llamas y hablamos.

- Nos han 'filtrado' que tiene algún otro proyecto editorial entre manos.

- No tengo remedio. Este último libro casi me deja trastornado y ya estoy pensando en una próxima obra. Escribir da mucha satisfacción y me recuerda que soy un periodista que sólo quiere comunicar.

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