«Nos da muchos problemas no tener aprobado aún el PGOU»

Tras 26 años de trabajo municipal, los últimos 16 como alcalde, Agustín Saiz (PP) reconoce que sigue teniendo la misma ilusión que el primer día por mejorar un municipio que ha visto crecer en esos 26 años. Y no solo eso. Si las cosas siguen como hasta ahora, no descarta volver a presentarse en unos próximos comicios, como siempre, con el PP. Sobre la situación actual del municipio, es optimista, «se salvará el año con buena nota».

- Casi todos los Ayuntamientos se quejan de falta de recursos.

- Bueno, nuestra situación económica es de un Ayuntamiento saneado, con un único crédito que no afecta a la situación financiera. Y a pesar de ser un Ayuntamiento pequeño, se ha hecho un gran esfuerzo en muchas obras financiadas en gran parte por las arcas municipales.

- Esa situación facilitará la elaboración de los presupuestos...

- Al final hay lo que hay. Los presupuestos serán semejantes a los del pasado año y se debatirán en pleno, como siempre, sobre el mes de mayo, cuando tengamos claras las cifras que cuadrar.

- ¿Queda alguna plaza por mejorar?

- Las plazas grandes ya están, y son la envidia de muchos municipios. Ahora actuaremos en los pequeños rincones. Y como asunto pendiente para este año en ese campo, con apoyo del Leader, la idea es rehabilitar el sendero que une La Rueda con Villasuso.

- ¿Y las viviendas sociales?

- En cuanto a las viviendas sociales, el terreno está ya adquirido por Gesvican. El problema es que el suelo elegido, en el centro del valle, solo permite construir viviendas unifamiliares mientras no se cuente con el nuevo Plan General de Ordenación Urbana.

- Siempre el PGOU. Con las últimas experiencias, ¿le asusta?

- No me asusta el plan general, todo lo contrario. Se que es complicado, que hay muchos vecinos interesados en él, pero nunca se puede dar respuesta a todas las necesidades individuales. Será bueno para el municipio. De hecho nos da más problemas no tenerle aprobado que el proceso que se está siguiendo. Las alegaciones que en su día se hicieron han quedado recogidas por el nuevo plan, y la prueba es que lleva dos semanas a información pública y apenas han llegado más alegaciones.