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N. CAVIA
Martes, 8 de septiembre 2009, 02:29
La fiesta Guerras Cántabras tendrá antes de final de año el sello de calidad de las normas ISO de Aenor. Así lo espera el presidente del colectivo organizador, la Asociación Guerras Cántabras, Valentín Aguado Quintial. Ayer hizo balance de la última edición, con un pie en ella y otro ya en la próxima cita, el décimo aniversario. En cuanto a la edición que terminó el domingo, la directiva está «más que satisfecha». Entre los motivos el que haya venido más gente repartida en más días, la mejora creciente de los actos que los propios festeros ofrecen, dirigidos por la asesora artística, Anabel Díez, y el asesor histórico, Joaquín de Diego, y «el mejor ambiente general».
Entre lo peor, destacó el ataque sufrido por el campamento unos días antes de iniciar la fiesta «con el que algunos quisieron frustrarla, encontrándose con que la respuesta fue inmediata y la unión de los festeros aún mayor». Personalmente, reconoció que no haber contado con todo el nuevo Templo de Jano, fue una «decepción».
Asamblea nacional
Y avanzó que el primer acto de la «especial» décima edición será la celebración en Los Corrales de Buelna de la Asamblea Anual de la Federación Española de Fiestas y Recreaciones Históricas, a mediados de mayo. «Un honor que aprovecharemos para hacer gala de nuestra organización y promocionar el turismo del valle, la comarca y Cantabria».
Entre los retos del futuro próximo, apuntó la necesidad de contar cuanto antes, «aunque está difícil», con un campamento festero estable y hacer una realidad del esperado Centro de Interpretación de Guerras Cántabras, «para que no se conviertan en frustraciones».
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