Un Belén de corcho y piña

Un artesano llamado Fidel Fernández, vecino del pueblo de Barcenaciones y especializado en hacer centros de flores secas, es el artífice del Belén del pueblo este año, confeccionado con corchos de botellas de vino y piñas. Se encuentra ubicado en la ermita de San Roque, en el centro de la localidad.

La característica fundamental de este Belén, además de encontrarse en uno de los pueblos más bellos del municipio de Reocín, consiste en que las casas y alguna de las figuras que conforman el conjunto artístico, son una reproducción exacta de las viviendas actuales de Barcenaciones, como el Palacio de los Ingleses, la iglesia de San Juan Bautista, la casa de Aguedita y la de Currina, el puente de Golbardo, incluso el propio bar de Fidel, está fielmente representado en esta formación belenística que cuenta con una reproducción de la famosa cueva de Barcenaciones, junto a la que todos los años el día 5 de enero se acerca la Cabalgata de los Reyes Magos para entregar a cada niño del pueblo en persona y llamado por su nombre, los correspondientes regalos.

Fidel ha tardado todo un año en hacer esta reproducción, con la ayuda de los vecinos del pueblo para encajar la electricidad y otros remates, pero las casas del Belén las ha confeccionado Fidel en sus ratos libres, una a una con los tapones de corcho de 2.000 botellas de vino que han ido guardando él y sus amigos, ya que su negocio, del que vive, es el bar del pueblo. En este establecimiento tiene su taller en la trastienda lleno de artesanía de flores secas, maderas, cubos pintados y sus colecciones privadas de jaulas de madera y otras cosas que quiere compartir con sus vecinos y clientes.

Cuando un visitante entra en el bar de Fidel encuentra además de un excelente moscatel o vino blanco de la nava perfectamente custodiado en las barricas que se guardan en la bodega, al fondo del bar, puede observar las antiguas fotografías del pueblo y de la comarca.

Fidel ha trabajado de forma altruista para alegrar las navidades a los vecinos de su pueblo, sobre todo con la ayuda de su mujer a la que define como «mi bastón, ella siempre ha sido mi musa».

Los vecinos del pueblo de Barcenaciones contemplan con ilusión este original Belén hecho con tapones de corcho, que se ha ido fraguando en el taller de este vecino, o lo que es lo mismo la trastienda de su bar, dónde ha regalado esas horas 'libres de precio' y la ilusión a los niños y mayores de Barcenaciones.

Este pueblo es uno de los que ya aparecen mencionados en el Cartulario de Santillana del Mar (hacia el año 1000). De su arquitectura destaca la iglesia parroquial de San Juan Bautista del siglo XVII. También pueden verse numerosas casonas de buena factura.

La localidad celebra San Benito el 11 de julio, con una peregrinación hasta la ermita de este santo, que está declarada Fiesta de Interés Turístico Regional.