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José María Gutiérrez
Viernes, 7 de octubre 2011, 15:08
Los campos de La Maruca, en Muriedas, acogieron por tercer año consecutivo el tradicional partido de fútbol de hermanamiento entre miembros de la Guardia Civil de Cantabria e integrantes de la asociación Gitanos de Hoy, de Santander, incluido en el trofeo Virgen del Pilar de fútbol 7. Y por tercer año consecutivo se impuso la Guardia Civil, aunque con un resultado ajustado de 4 a 2.
Esta iniciativa, que comenzó hace tres años, fue consensuada entre el presidente de la citada Asociación y el Coronel Jefe de la Guardia Civil de Cantabria, Justo Chamorro, ya que los primeros interesaron jugar un encuentro de fútbol con este Cuerpo, proponiendo el Coronel que se integrara dentro de los diferentes actos que se organizan con motivo de la celebración de la Patrona de la Guardia Civil.
Los agentes, sin tricornio pero con uniforme deportivo, verde por supuesto, y en plena forma física; y los gitanos, intentando estar a la altura, con menos entrenamientos a cuestas y con algunas camisetas de andar por casa.
Fue un encuentro lleno de deportividad, picaresca, bromas, anécdotas y mucha historia a sus espaldas, pero que pretende y consigue demostrar que los tiempos han cambiado y que la integración de los gitanos en la sociedad sigue dando pasos adelante.
El resultado era lo de menos, aunque los jugadores se empeñaron en darlo todo sobre el campo: el honor estaba en juego. Y los 'gitanos', nobleza obliga, tenían muchas 'ganas' a los agentes.
La Guardia Civil se notaba que no estaba de servicio y perdonaba las entradas duras y hasta los 'robos' de balón. No hubo nada de lo primero y mucho de lo segundo.
La superioridad física de los agentes y su mayor calidad técnica hizo que esta vez fueran los gitanos quienes corrieran detrás de ellos, invirtiendo el orden tradicional en las calles.
El resultado favoreció a los Guardias Civiles, aunque en cuanto a aficionados y animación golearon los gitanos, con notable apoyo desde la banda.
El partido formaba parte de una de las semifinales del trofeo 'Virgen del Pilar' de fútbol 7, organizado con motivo de la festividad de la patrona de la Guardia Civil. La otra semifinal enfrentó al Cuerpo Nacional de Policía y a los Bomberos, aunque la atención y el morbo se centró por completó en el otro choque.
Por una vez en su histórica relación, el encuentro entre guardias civiles y gitanos no acabó en el cuartelillo, sino en una foto de familia sobre el cesped entre risas, bromas, saludos y promesas de revancha para el próximo partido. Los tiempos han cambiado.
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