Bárcena de Pie de Concha despidió al alcalde de "toda una vida"

El pueblo de Bárcena de Pie de Concha volvió a refrendar su cariño por el que ha sido su alcalde toda la vida, José Félix de las Cuevas, fallecido en la mañana del martes en el domicilio familiar. Pero esta vez no fue en las urnas, sino en las honras fúnebres por su eterno descanso. Sus vecinos quisieron acompañarle en el último viaje y la iglesia de San Cosme y San Damián se quedó pequeña, dentro y fuera, ante las decenas de personas de toda condición que quisieron mostrar su respeto por Pepín', como todos le conocían. Los lugareños, conocedores del lugar, llenaban la iglesia ya media hora antes del comienzo del oficio religioso. Eso sí, respetuosamente dejaron libres los bancos destinados a la familia y autoridades. Las calles aledañas a la iglesia estaban llenas ya cuando llegó el coche fúnebre, puntual, a las cinco y media de la tarde.

Poco antes había llegado el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, y el consejero de Obras Pblicas y Vivienda, Francisco Rodríguez. Con ellos, diputados, alcaldes y concejales de más de una veintena de municipios, de todas las ideologías, de ahora y de antes, representantes de la Guardia Civil, empresarios y muchos amigos. El silencio fue la nota dominante. El cura del valle, Juan Luis Cerro, abrió la comitiva y los jóvenes de la familia llevaron el féretro a su lugar, frente al altar de la iglesia que, a pocos metros de su casa, habitualmente visitaba. Dentro ya estaban los miembros de la Corporación de Bárcena de Pie de Concha, con su primer teniente de alcalde, Agustín Mantecón y la mano derecha de José Félix de las Cuevas, Carmen Mier, al frente. También esperaba dentro, desde muy temprano, el que fue presidente de Cantabria y amigo personal, José Joaquín Martínez Sieso.

El párrocó abrió el oficio religioso destacando la dedicación de 'Pepín' por el servicio público, una vocación que llevó a todos los campos. Así, el sacerdote también hablaba de su colaboración siempre que se le solicitaba, con Cáritas Parroquial, con los más desfavorecidos. Y a la salida, aplausos unos, lágrimas otros y respeto todos por un hombre que, como también había dicho Juan Luis Cerro, forma parte ya de la historia de la comarca y de Cantabria.

Falleció el martes

El alcalde de Bárcena de Pie de Concha, José Félix de las Cuevas (PP), falleció el martes en su domicilio del pueblo de Bárcena, a los 83 años, después de una larga carrera política dedicada a sus vecinos.

De las Cuevas, el alcalde más veterano de Cantabria y uno de los más experimentados de España ha sido calificado por sus compañeros de fatigas políticas como un hombre "entrañable, cercano y muy querido por todos". Así lo decía la alcaldesa de Los Corrales de Buelna, Mercedes Toribio, quien lamentaba profundamente la pérdida de un "maestro".

En término semejantes se pronunciaron alcaldes y políticos de la zona. A la mano derecha del alcalde, Carmen Mier, apenas le salían las palabras. Era algo más que su amigo y padre político, era un "referente". Como teniente de alcalde señaló que en cuanto se sepa algo más se comunicará a los medios de comunicación, con referencia expresa al día y hora de los funerales por su eterno descanso. También agradeció las muestras de dolor llegadas al Ayuntamiento de Bárcena de Pie de Concha durante toda la mañana.

Desde todos los puntos de Cantabria y España están llegando muestras de dolor recordando al que ha sido desde el inicio de la democracia alcalde de su pueblo.

37 años siendo alcalde de su pueblo

Todos le llamaban 'Pepín', la muerte le ha sobrecogido en su casa, en Bárcena de Pie de Concha. Nos deja pues, el edil más veterano de Cantabria y el segundo de España, tras diez legislaturas consecutivas al frente del gobierno de su pueblo, siempre con mayoría absoluta salvo en las últimas elecciones, en 2011, donde se formó un gobierno en coalición con el PRC, y compartió áreas de gobierno con su socio regionalista Agustín Mantecón González.

De las Cuevas comenzó su carrera política en el año 1955, que fue concejal en la época de Franco. En las primeras elecciones democráticas concurrió con la UCD y después entró en el Partido Popular.

El secreto para tener la confianza durante 37 años en los que ejerció de alcalde reside en "ayudar a tus vecinos, escucharles y ser imparcial ante sus problemas. A veces tendrás que tomar decisiones difíciles, y muy desagradables, pero, si aciertas con las soluciones, podrás dormir tranquilo", aseguraba en una de sus últimas entrevistas concedidas a EL DIARIO MONTAÑÉS .