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Sergio Herrero
Viernes, 7 de junio 2013, 14:12
Es lo que tiene jugar con la vista en el campo y el oído en el transistor. Si dependes de los demás, no puedes esperar nada positivo. Eso le pasó al Racing. Los deberes de este fin de semana estaban hechos con el 0-2. Pero el no haber completado la tarea tantas y tantas semanas durante toda la temporada, le dejó a merced del Mirandés. Evaluación continua. Y en fútbol, el suspenso no te hace repetir curso, si no bajar a uno inferior. Al final, la losa pesó en el conjunto cántabro, que terminó siendo empatado en Ponferrada. El triunfo de los de Miranda de Ebro ante un relajado Córdoba manda a los de Alejandro Menéndez a Segunda División B. Se acabó. Y el no ganar, deja casi imposible aferrarse al clavo ardiente de la cuarta posición por la cola. Ni en los despachos.
El Racing completó una primera parte notable. El equipo montañés, mentalizado para la batalla, se aprovechó de una Ponferradina a la que le dio vértigo verse peleando por cotas altas. El zumbido de los aparatos de radio empezó a comunicar los goles de la Unión Deportiva Las Palmas y a los del Bierzo les temblaron las piernas.
Así, los apretones del Racing tuvieron su recompensa. Ferreiro botó un córner, que prolongó Yuste, y Gullón, en el segundo palo, mandó la pelota al fondo de las mallas para adelantar a su equipo. Los visitantes aprobaban el primer 'parcial' de la asignatura en El Toralín.
Pero la maldita radio también tenía reservadas malas noticias para el Racing. No demasiado sorpresivas, pero sí negativas. Y definitivas. El Mirandés se adelantaba ante un Córdoba más preocupado de coger vacaciones que de regalar a su afición una victoria en su despedida del Arcángel hasta el año que viene.
A pesar de todo, el conjunto cántabro fue superior a su rival durante la primera mitad. Pero quedaban aún 45 minutos más para recibir la calificación final.
El Racing salió en la segunda parte dispuesto a subir nota. Quini dispuso de una ocasión clarísima. El delantero realizó una vaselina sobre Santamaría, pero el disparo salió tan flojo que al portero le dio tiempo a llegar para despejar sobre la línea de gol. Tachón. Sin embargo, Jairo se encargó de corregir la errata. Un pase largo de Tiago Pinto a la espalda de la defensa lo aprovechó el de Cabezón para marcar el segundo. Corría el canterano chocando manos por 'La Gradona' improvisada de El Toralín, cuando el Mirandés volvía a marcar en Córdoba. Los burgaleses, más cerca de su 'graduación'.
Francis pudo hacer el tercero. Se coló por el vértice del área y su duro disparo se estrelló en el larguero. La ocasión sólo fue el preludio de los peores momentos del Racing. Apuros. Un error en el marcaje permitió a Máyor recortar distancias con un remate de tacón, solo, dentro del área. A los cántabros se les veía tocados.
Tanto, que el empate tenía que llegar. Yuri, en el segundo palo, remató de cabeza al fondo de las mallas. Era la estocada final. El buen examen realizado durante todo el partido, hecho una bola y directo a la papelera. El Racing es equipo de Segunda División B. La conclusión.
Directo 115367 Si
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