Cabárceno se podrá ver desde el aire a partir de hoy

La apertura del teleférico de Cabárceno ya tiene fecha: hoy. Tras varios retrasos para la puesta en marcha, casi dos años después del inicio de la obra y "después de muchas vicisitudes", este jueves entra en funcionamiento la telecabina para ver el Parque de la Naturaleza desde lo más alto.

Cambia el concepto y el precio, que desde mañana aumenta en cinco euros para adultos y dos para niños. Las cabinas permitirán recorrer el 70% del recinto a 15 metros del suelo y tardarán entre treinta y cincuenta minutos en completar los seis kilómetros de instalaciones que enlaza la telecabina. La idea es que el teleférico tenga una capacidad de transporte de unas 1.200 personas por hora.

El consejero de Industria y Turismo, Francisco Martín, cree que hay un aspecto positivo en el retraso de la apertura: que se puede extender "la atracción" de visitantes tras el verano, después de que en julio y en agosto Cabárceno haya tenido cifras de visitantes "históricas". Martín ha subrayado que en agosto el parque "ha batido tres días seguidos el récord máximo de visitantes", y ello aunque todavía no había telecabina. "Eso quiere decir que probablemente esos días, que ha habido que cerrar Cabárceno porque se ha cubierto ya el cupo de visitantes, la telecabina no hubiera añadido nada más. Una vez que ya llenas...", ha manifestado.

El pasado lunes los visitantes del Parque pudieron ver 'volar' las cabinas en las pruebas previas a la puesta en marcha. En concreto se han realizado 100 horas de vuelo antes de cargar pasajeros

El consejero ha animado a la gente a ir a Cabárceno "porque hay un atractivo nuevo en el parque", la telecabina cuya concesionaria es la empresa mexicana Transportes Alternativos de Cabárceno SA (Accsa).

La apertura de la cabina lleva aparejada la subida de las tarifas de acceso a Cabárceno, ya que para garantizar el negocio a la concesionaria mexicana se incluyó el uso del teleférico en el precio de la entrada al parque.

Dos recorridos para ver el Parque

Un total de 35 pilonas sostienen el entramado de cables y las 60 cabinas, que giran en torno a cuatro estaciones en las que los usuarios podrán subir o bajar. Quienes visiten el lugar optarán por dos recorridos aéreos distintos. El primero es triangular, una propuesta singular, porque solo hay otra en los países nórdicos de estas características, explica el responsable de Cantur, Javier Carrión. Esta ruta parte de las inmediaciones de la localidad de Cabárceno y el lago del Acebo, sube hasta el mirador de Rubí y desciende hasta la parte superior de la zona de osos. En este punto hay una parada doble, porque a ella llega también la otra línea, que enlaza los osos con las áreas en las que viven rinocerontes e hipopótamos.