Arde parte de la cubierta de una nave en el polígono de Guarnizo

Poco después de las tres de la tarde, varias llamadas al 112 alertaron sobre un incendio en el techo de la nave de la empresa Celestino Pacheco y hasta allí se desplazaron cuatro vehículos de los Bomberos de Santander, con 15 de sus efectivos, la Policía Local de Astillero, agentes de la Guardia Civil y sanitarios del 061.

La empresa en la que se ha producido el incendio se dedica a la fabricación de accesorios de alambre con diferentes recubrimientos tanto para uso particular como industrial (hacen parrillas, cestas, rejillas y mallazo para la construcción) y tiene un horno en el que se realiza un proceso de plastificación de ese alambre. En ese horno ha sido precisamente donde se ha iniciado el fuego y enseguida las llamas han comenzado a subir a través de una de las chimeneas.

El fuego ha salido hacia el exterior por esa chimenea y ha comenzado a arder parte del techo (de chapa y luceras) de la nave. Se ha quemado una de las luceras, de unos 40 metros y posteriormente otra de 25 metros. Las llamas y el penacho de humo que se han podido ver desde el exterior, en un primer momento, han sido espectaculares, según señalan algunos testigos.

Los bomberos, que han tenido apagar las llamas de la cubierta accediendo con el camión escala y desde la nave contigua, la de grúas FAM, han trabajado con mucha rapidez y han evitado que se propagase el incendio. De todas maneras, el jefe de intervención de los efectivos del Parque de Santander matiza que su intervención ha sido "menos complicada de lo que se pensó en un primer momento". Poco más de una hora después de su llegada, el cuerpo ya tenía controlado y casi extinguido el incendio.

La decena de trabajadores que en esos momentos estaba en la empresa salió por sus propios medios y solo uno de ellos, que sufre asma, ha tenido que ser atendido posteriormente por los sanitarios del 061, que finalmente decidieron evacuarle al hospital Marqués de Valdecilla para ser tratado por inhalación de humos. Según algunos testigos, este operario, junto a otros compañeros, intentaron hacer frente a las llamas con los medios que en esos momentos tenían a su alcance, utilizando alguno de los extintores que había en la empresa, pero cuando quisieron atajar las llamas ya el fuego se les había ido de las manos.