'Cantabria beauty', un cóctel ganador

Borja Gutiérrez, en la edición para Jefes de Bar y con su combinado 'Cantabria beauty' (Cantabria bonita); Laura Medino, en la edición para Jóvenes Barman; y Mario López, en el Concurso Regional de Flair (Coctelería Acrobática) resultaron ayer ganadores de los respectivos campeonatos regionales de coctelería. Los tres obtuvieron su pase para representar a Cantabria en el Campeonato Nacional de Coctelería que se celebra en Zaragoza en el mes de noviembre. El concurso interregional lo ganó José Multiva, de Navarra.

Los 35 participantes que se presentaron estaban con los nervios a flor de piel en el certamen que se celebró en el Paraninfo de la Magdalena, ante unas 250 personas que disfrutaron con las acrobacias de los bármanes.

El certamen, organizado por la Asociación de Barmans de Cantabria, en colaboración con el Ayuntamiento de Santander, que resultó un éxito tanto por el nivel de los participantes como por la asistencia. «La cifra de competidores en la región superó el número de Barcelona o Madrid, ciudades que registran sobre los 17 concursantes. Cantabria es una de las regiones con más campeones de España», dijo el presidente de la asociación, Abraham Rodríguez. La Asociación de Barmans de Cantabria fue campeona de España por comunidades en 2016 y tercera por equipos en el de 2017, además de lograr un campeón de España en modalidad Jóvenes Barman en 2017 y un tercer puesto en Jefes de Barra ese mismo año.

También se celebraba ayer el concurso interregional con profesionales de Cantabria y asociaciones de bármanes de Vizcaya, Guipúzcoa, Galicia, Navarra y La Rioja, quienes compitieron por los premios a la destreza, la degustación y la decoración.

Un tintineo de la copa al rozar con la botella penaliza al barman, y si se deja el tapón de la botella sobre la mesa también. En cambio, contabiliza positivamente si el concursante 'clava las copas', es decir, si cada una de las cinco copas que tienen que preparar para el certamen logran el mismo nivel. Todo esto es lo que «diferencia un trabajo fino de uno zafio», explicaba uno de los jueces del certamen, Chema Rello.

El jurado técnico no perdió detalle de cada una en las actuaciones de los concursantes. Sus miradas se clavaron en el movimiento de las manos de los bármanes, las decoraciones que prepararon en el canto de las copas, la limpieza de su técnica y el sabor del cóctel. Esto último «es lo más importante a la hora de valorar un cóctel, que sea sabroso, aunque la técnica haya fallado en algún punto», opinó el juez Nacho Zarzosa, presidente del Club de Barman de Bilbao-Vizcaya.

Para lograr la máxima parcialidad de los jueces, se creó la figura del 'juez de jueces' que vigiló que se cumplían las normas, que los jueces estuvieran aislados y que la elaboración de cada cóctel fuera anónima.

«La juventud en Cantabria está pegando fuerte. Hay mucho hijo de campeón que lo está haciendo muy bien», añadió Zarzosa. Es el caso de Markel Escuredo que con 18 años es subcampéon de España de 2017, a base de «mucho esfuerzo y práctica».

Entre los concursantes, las mujeres aún son una minoría. «Hace dos años comenzó una revolución en el sector y cada vez se ven más mujeres detrás de la barra», afirmó Sara Pedrosa, barman desde hace 13 años, cuatro años campeona en Vizcaya y subcampeona de España en 2007. Entre el público estaba uno de los padres de la coctelería de la región, Antonio Serrano, que recibió un caluroso aplauso y también la cántabra Estrella, madrina de la Federación de Barmans de España.