Médicos de familia y pediatras de Cantabria piden más recursos y más tiempo por paciente

El Colegio de Médicos de Cantabria reclama un "incremento presupuestario y de recursos humanos, un entorno profesional estable y un tiempo mínimo de 10 minutos por paciente" para los médicos de familia y pediatras. Y es que el sector denuncia la sobrecarga asistencial como un problema no solo para el médico sino de salud pública en las propias salas de espera. Hablan de un empeoramiento de la calidad de las consultas.

La celebración el próximo 12 de abril del Día de la Atención Primaria, sirve a los médicos de Cantabria para poner sobre la mesa los principales problemas a los que se enfrenta este servicio, considerado por ellos como "la puerta" hacia el sistema sanitario.

En Cantabria hay entre 3.500 y 3.800 médicos colegiados, de los cuales 400 son de Atención Primaria y 80 son pediatras

El presidente del Colegio de Médicos de Cantabria, Tomás Cobo, y la vocal de Atención Primaria de esta entidad, Montserrat Matilla, han hecho referencia al decálogo de Atención Primaria, publicado el año pasado y han defendido el papel de este médico como un "especialista" al igual que los de los hospitales.

Otras sociedades como la de Pediatría Extrahospitalaria y de Atención Primaria de Cantabria o la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, y el Sindicato Médico de Cantabria, también han reivindicado el derecho de esta especialidad a ser reconocida igual que las demás.

Los profesionales sanitarios han denunciado la sobrecarga asistencial a la que están sometidos los médicos de familia, con consultas que superan los 50 pacientes diarios, la falta de personal sustituto y los problemas que supone la "autocobertura" médica en los periodos vacacionales, en el que un médico tiene que atender a los pacientes de otra consulta.

En este sentido, el presidente de la Sociedad de Pediatría Extrahospitalaria y de Atención Primaria de Cantabria, Alberto Bercedo, ha asegurado que la sobrecarga asistencial "no solo es un problema para el médico sino un problema de salud pública en las propias salas de espera", provocado por la acumulación de enfermos en una misma consulta. Además, ha destacado que la calidad de las consultas en la Atención Primaria ha "empeorado" y que las plazas de equipos en esta especialidad se han transformado en plazas de área con pediatras itinerantes, "sin justificación alguna".

También ha defendido un mayor acceso por parte de los médicos de familia y pediatras al catálogo completo de pruebas complementarias y capacidad de realización de pruebas diagnósticas.

El presidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, Miguel García, ha destacado el papel que desempeña el servicio de urgencias de Atención Primaria, que funciona cuando los centros de salud están cerrados, pero cuyos profesionales no tienen ni las mismas condiciones de trabajo ni el mismo reconocimiento que sus compañeros de los centros de salud.

El representante del Sindicato Médico de Cantabria Óscar Ortiz ha planteado algunas soluciones para frenar la "insuficiencia" asistencial de este servicio, como el aumento presupuestario en la Atención Primaria, por encima del 15 %, el incremento del número de sustituciones, la reducción del número de pacientes por cupo y el cumplimiento de los 10 minutos de atención por paciente.

Tomás Cobo ha explicado que en Cantabria hay entre 3.500 y 3.800 médicos colegiados, de los cuales 400 son de Atención Primaria y 80 son pediatras y ha señalado que mientras no se realicen contratos "dignos", de al menos dos o tres meses, los médicos cántabros "emigrarán allá donde se les ofrezca un contrato mejor, ya sea el País Vasco, Asturias o Galicia".