El STEC defiende el nuevo calendario escolar porque los colegios "no son guarderías"

STEC subraya, además, que la capacidad negociadora del calendario "radica exclusivamente" en la Mesa Sectorial de Educación, es decir, no incluye ni a las familias ni a los directores de centros.

Tajante sale el sindicato a la palestra tras las críticas de las asociaciones de padres (FAPA y Concapa) que dicen que la propuesta de que haya una semana de descanso por cada dos meses lectivos es una medida que solo beneficia a los profesores.

En este sentido, el STEC, sindicato mayoritario en la enseñanza, insiste en que "el calendario de los alumnos, no es el calendario del profesorado ni el de las familias", y que la conciliación de la vida familiar y laboral no es competencia de la Administración Educativa. "Los colegios y los institutos son exclusivamente centros educativos (¡que no es poco!), no guarderías".

Recuerda que el número de días lectivos se mantienen en 175 y matiza que la diferencia radica en que antes "se repartían de forma poco racional en tres trimestres muy descompensados y ahora, se organizarán de forma más pedagógica en cinco bimestres, como se vienen haciendo desde hace mucho tiempo en la mayor parte de los países más avanzados de Europa".

Al mismo tiempo muestra su sorpresa ante alguno de los argumentos en contra de los padres y dice entender que la Concapa, una organización conservadora vinculada a la enseñanza confesional "prefiera aferrarse al calendario tradicional basado en las festividades religiosas", pero lamenta que la otra "supuestamente progresista" como FAPA, haya optado "también por mantenerse en esas mismas posiciones conservadoras".

En cuanto a los plazos y pasos seguidos en la negociación de esta propuesta de calendario los padres se han quejado de que no se les ha pedido opinión-, STEC dice que entiende que el consejero informe y escuche a otras partes (representantes de familias, de directores de centros, etcétera) pero legalmente la competencia negociadora radica exclusivamente en la Mesa Sectorial" en la que están representados Administración educativa y sindicatos docentes.

El calendario tradicional español es "de los pocos que quedan en Europa, es la antítesis de estos planteamientos pedagógicos", concluyen