Complicado rescate a 2.500 metros de altitud

Los afectados, dos hombres, se encontraban practicando escalada cuando al primero de ellos se le ha soltado un anclaje y ha caído unos 15 metros. Los golpes le han provocado politraumatismo con rotura de tobillo, mientras que su compañero, que no se ha precipitado, ha sufrido una fractura de mano.

Ellos mismos han dando aviso de su situación al Centro de Atención a Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria, que ha movilizado al equipo de rescate el helicóptero del Ejecutivo regional y ha alertado al GREIM.

Con la aeronave en la zona los efectivos de salvamento han confirmado la imposibilidad de acceder hasta los heridos mediante una operación de grúa, dado que se encontraban en una chimenea confinada de muy difícil acceso. Para iniciar la operación el helicóptero ha dejado a rescatador, médico y material sanitario en la cima de Horcados Rojos, y dada la dificultad de la maniobra, ha descendido hasta Potes a recoger a dos miembros del GREIM, a los que ha llevado hasta el mismo punto.

Con el grupo reunido, los cuatro efectivos han iniciado el descenso a pie por la chimenea hasta llegar a una pared vertical en la que han montado una instalación de rápel, por la que han librado unos 100 metros hasta llegar a los accidentados.

Ya junto a los heridos, la médico ha realizado una primera atención de ambos. Al más afectado le han trasladado a una camilla y mediante técnicas de rescate vertical, le han bajado unos 50 metros hasta llegar a una gran repisa. El segundo afectado ha descendido hasta zona segura rapelando junto con el técnico de rescate del Gobierno.

Desde este saliente, se ha procedido al izado de la médico, de la camilla y del herido más leve, que ha accedido a la aeronave en un doble izado junto al rescatador. Los miembros del GREIM, por su parte, han continuado el descenso rapelando hasta el punto de encuentro con sus compañeros, que les han recogido en todoterreno.

La operación de rescate ha sido muy complicada para los efectivos que han actuado por tierra, por las dificultades que ofrece el terreno, y para los que han intervenido por aire, por las condiciones meteorológicas, con abundante nubosidad, y la cercanía del helicóptero a la pared.