"Si Salvador Blanco sigue, que busquen otro socio"

El idilio político entre Podemos y el Gobierno regional mejor dicho, el PRC está más cerca que nunca de romperse. El cambio en el liderazgo de la formación morada, tras la llegada de Julio Revuelta a la secretaría general, se ha traducido en una mayor agresividad en las exigencias al Ejecutivo. Y Sodercán es el principal punto de conflicto. La gestión de su director, Salvador Blanco, salpicado por las irregularidades detectadas por el interventor entre los años 2008 y 2010, ha provocado el choque más fuerte entre el bipartito y el que ha sido hasta ahora su mejor aliado en la oposición. Podemos quiere hacer de Sodercán su bandera en la lucha contra la corrupción, aunque no existe ningún proceso judicial abierto en este caso, y condiciona su apoyo al Presupuesto del año que viene a la destitución de Blanco.

Esta estrategia ha levantado voces críticas dentro del propio partido, pero la dirección autonómica está decidida a forzar hasta el final, incluso si eso implica un cambio de alianzas en el Parlamento y Revilla les suelta la mano para sacar a bailar a Ciudadanos. «Si la condición indispensable es mantener a Salvador Blanco en el cargo, entenderemos que busquen otros socios», insistieron ayer en su órdago desde la cúpula de la formación.

Ciudadanos se muestra más flexible sobre la marcha de el director de Sodercán y presionarían en otros asuntos, como el regreso de la empresa a Industria. Al PSOE le incomodan cualquiera de las dos exigencias, pero ya llegó a un acuerdo con ellos para aprobar el vertido de los residuos de Guipúzcoa y el partido de Albert Rivera se coloca como la mejor opción para esquivar el ultimátum de Podemos.

Tezanos

La vicepresidenta, Eva Díaz Tezanos, avanzó ayer que su intención es hablar con todos los grupos para sacar adelante el Presupuesto. «Lo que ha caracterizado al Gobierno de socialistas y regionalistas a lo largo de este último año es precisamente hablar con todos los partidos representados en la Cámara para sacar adelante determinadas propuestas».

Una vez dicho esto, la dirigente socialista cargó contra la estrategia elegida por Podemos en las negociaciones que comenzarán en septiembre. «Me parece bastante irresponsable condicionar la aprobación de un presupuesto que aún no está elaborado y que no se sabe lo que va a reflejar», lamentó. Un argumento que convence a algunos miembros de Podemos, como el miembro del consejo estatal Marcos Martínez, que esta misma semana criticó a la dirección regional de su partido por anteponer la destitución de Blanco a pactar unas cuentas claves para el desarrollo de Cantabria.

Está por ver si las posturas se relajan dentro de un mes, cuando los representantes de los partidos se sienten en la misma mesa para llegar a un acuerdo, pero a día de hoy, la Ejecutiva autonómica de la formación morada no está dispuesta a dar un paso mientras Salvador Blanco siga al frente de Sodercán. «El amiguismo en las empresas públicas ha hundido la industria de Cantabria. No tragaremos con gestiones irregulares ni haremos la vista gorda ante el derroche de los fondos públicos, nuestro compromiso con la ciudadanía y con la regeneración y transparencia en las instituciones nos lo impide», destacaron. «No podemos consentir que pasen por sus manos más de 80 millones de euros anuales. Sodercán ha sido el paradigma de la gestión irresponsable y opaca», concluyeron.