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Guillermo Balbona
Miércoles, 31 de agosto 2016, 13:04
No hay tiempo para la tregua entre el Gobierno de Cantabria (PSOE-PRC) y el Ayuntamiento de Santander (PP), que han encontrado en dos emblemáticos proyectos culturales para la ciudad la excusa perfecta para lanzarse, de nuevo, todos los dardos a su alcance: el proyecto ... del Archivo Lafuente y sede asociada del Museo Reina Sofía en el inmueble del antiguo Banco de España y el futuro edificio a construir en el aparcamiento del Palacio de Festivales destinado a albergar el Museo de Prehistoria (Mupac).
Tras la polémica sobre el Mupac y su ubicación entre ambas instituciones, un culebrón que se prolongo meses y en el que se implicaron otros ayuntamientos de la comunidad, el alcalde de Santander abrió ayer otro frente en relación al proyecto del Archivo Lafuente. De la Serna acusó al Gobierno regional y a su departamento de Cultura de tener «absolutamente paralizado» desde hace dos meses y de forma «innecesaria» el proyecto para instalar la sede del Reina Sofía en el Banco de España. El alcalde desveló que el Ejecutivo «no ha entregado aún sus observaciones» al borrador del convenio elaborado por el Ayuntamiento, documento que recoge el ya anunciado compromiso de la ciudad de Santander de adelantar la inversión y el de la Comunidad de devolverla en diez años.
«No podemos hacer nada», lamentó e insistió De la Serna ante los periodistas, a los que adelantó que en los próximos días el Reina Sofía enviará la documentación del proyecto museológico. Las diferencias políticas y de prioridades ya asomaron en primavera. Pero en junio el proyecto de ubicar el Archivo Lafuente en el Banco de España, y su consiguiente conversión en «sede asociada» del Reina Sofía, vivió un giro al conocerse el acuerdo institucional que suponía que la financiación de esta iniciativa cultural será asumida por el Ayuntamiento. El acuerdo alcanzado, tras un primer borrador, y a falta de ese convenio definitivo, plantea que el préstamo de la ciudad al Gobierno de Cantabria tendrá que ser devuelto en diez años. «El ofrecimiento del Ayuntamiento, en cuanto a la financiación de esta actuación era, fundamentalmente, para desbloquear la situación, para arrancar con celeridad y para iniciar una tramitación que nosotros, en la parte que nos corresponde, vamos a hacer de forma ágil. Pero claro, si nos tiene paralizados durante dos meses y no nos podemos ni mover porque ni siquiera sabemos cuál es su opinión (la del Gobierno de Cantabria) sobre el convenio, difícilmente podemos hacer absolutamente nada», censuró el regidor municipal.
El alcalde recordó que el Ayuntamiento se comprometió a que si el convenio estaba firmado a finales de este mes (hoy es día 31) aprobaría este mismo año el proyecto del Reina, pondría en marcha la modificación del Plan General de la ciudad para convertir el Banco de España en sede asociada, y licitaría el proyecto de construcción.
El Consorcio
Y mientras De la Serna abría este nuevo frente de litigio con el Gobierno, el Ayuntamiento, en boca de su concejala Gema Igual, insistía en sus críticas al consejero de Cultura por «no haber informado» al alcalde de la ubicación elegida para el Museo de Prehistoria. Tras meses de incertidumbre e indecisión sobre la futura y ansiada infraestructura, el anuncio del destino definitivo lejos de desatascar la relación la ha enconado aún más.
Igual calificaba ayer de «infantil» la actitud del consejero Ramón Ruiz y aseguraba que este «no tuvo, en ningún momento, la intención de hablar con el alcalde». «Resulta ridículo que el consejero siga inventando justificaciones para no reconocer que ha incumplido el compromiso de reunirse con el Ayuntamiento», censuró la edil. Igual volvió a negar que el consejero pidiera el teléfono del alcalde o una entrevista con él y dijo sentirse «engañada» por Ruiz.
Para la concejala la actitud del consejero «no tiene justificación» y sus palabras «sobre lo que estaba haciendo o dejando de hacer el alcalde» son «impresentables» e «impropias» de un miembro del Gobierno (Ruiz dijo que intentó hablar con De la Serna pero que le fue imposible ya que «estaba ocupado con eventos importantes»).
La respuesta de la Consejería de Cultura fue inmediata. El departamento que dirige Ramón Ruiz amenazó al Consistorio con disolver el Consorcio ya que «en lugar de ser una institución de consenso, discusión y reflexión, se está convirtiendo en arma arrojadiza e instrumentalizada para intereses (municipales) que no son los que inspiraron su creación».
Cultura acusó a Gema Igual de mentir, puesto que «es conocido que Gobierno y Ayuntamiento han mantenido contactos» sobre la sede definitiva del Mupac. Y subrayó que el alcalde recibió «distintas peticiones de entrevista tanto por parte de la Consejería como desde el propio consejero».
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