Van den Eynde no dimite

Van den Eynde ha desvelado sus intenciones tras la reunión ordinaria del grupo parlamentario, en la que, entre otros, han participado, él mismo; la nueva presidenta y el ya expresidente del partido, María José Sáenz de Buruaga e Ignacio Diego. Cuestionado sobre la posibilidad de dimitir tras la elección de Sáenz de Buruaga con la nueva presidenta del partido, a la que acusó de "traición" cuando supo que iba a presentarse para este cargo, Van den Eynde ha reconocido que "al principio lo barajé" pero "luego le dio una vuelta" tras hablar con "bastantes compañeros".

"La posibilidad de dimitir no existe porque esa es mía y esa no existe porque no voy a dimitir", ha afirmado Van den Eynde que, preguntado acerca de si le constaba o había oído de que por parte de Sáenz de Buruaga y sus afines se planteaba el proponer otro portavoz parlamentario, se ha limitado a señalar: "No, fuera de lo que oyes en barras de bar, no". Cuestionado por ver cómo se podrá llevar esta disparidad de sensibilidades en el grupo parlamentario y en el partido, Van den Eynde "se imagina" que "con diálogo y generosidad" y, si se "cumple lo que ha anunciado" la candidatura ganadora, la de Sáenz de Buruaga se podrá gestionar "bien".

Fuego cruzado

Las elecciones a la presidencia del PP cántabro han estado envueltas en polémica desde que la presentación de las dos candidaturas. Tanto María José Sáenz de Buruaga han tenido apoyos fuertes, y Van den Enynde ha sido el que más ha encendido el debate defendiendo al expresidente del partido. Tras acusar a Buruaga de haber traicionado a Nacho Diego, el portavoz del PP en el Parlamento ha tenido otros enfrentamientos. Con Isabel Urrutia (allegada a Buruaga) tuvo sus manos y sus menos. Y también con los trabajadores del PP, a los que acusó de ser parciales.