Coated Solutions solicita una segunda concesión y prevé crear 200 empleos

«Quiero ser prudente», insistió Íñigo de la Serna. Lo que hay hasta ahora -lo que, según explicó, aparecerá en Boletín Oficial del Estado- es la solicitud de la compañía. El primer paso. «La Autoridad Portuaria tiene la capacidad de ir a un proyecto en el que puedan también otras empresas mostrar su interés para concurrir en las mismas condiciones. Hay que ser prudentes porque desconocemos si hay otras empresas interesadas», puntualizó el exalcalde de Santander, que dejó claro que se trataría de una segunda concesión y no una ampliación de la inicial. Un proyecto con el que el presidente de Cantabria tiene una «obsesión». Miguel Ángel Revilla tomó el guante del ministro y tiró del hilo del anuncio.

Aseguró Revilla que el Ejecutivo «ha hecho un esfuerzo como no ha hecho con ningún proyecto» para que pueda ser realidad la segunda fase del plan de la compañía y lo vinculó a la necesidad de recuperar empuje industrial. «Remando todos en el mismo sentido -añadió- podemos conseguir grandes cosas».

No fue, en todo caso, el único anuncio que dejó el ministro en su repaso de actuaciones. Fue otro proyecto condicionado. Otra idea en marcha. De hecho, el propio presidente de la Autoridad Portuaria ya habló de ello en una entrevista con este periódico publicada en octubre del pasado año. «Una construcción en altura para dotarnos de una capacidad adicional de 10.000 o 12.000 coches», dijo González por entonces. De la Serna rebajó algo las cifras y situó el estado de las cosas en cuanto a esta iniciativa. «La necesidad de seguir teniendo suelo para poder albergar coches se ha paliado parcialmente con la puesta a disposición de 35.000 metros cuadrados», empezó diciendo respecto al espacio habilitado en la zona ZAL (la colindante con la terminal de carbón). Pero allí no caben «más de 1.500 o 2.000 coches». Lo otro es «un proyecto adicional».

¿De qué depende?

¿Y de qué depende? De entrada, del interés que tenga una empresa privada en construir y explotar ese silo de vehículos en el Muelle 8. «Está previsto poder sacar a través de un sistema concesional -intentando que sea el propio sector privado el que tenga interés en la construcción y explotación- para tener capacidad suficiente y albergar 5.000 vehículos. Ese proceso se va a iniciar y a intentar. Habrá que ver si existe el interés. Si no fuera así tendríamos que explorar otras posibilidades en las que hubiera participación del sector público».

De la Serna no se fue sin el guiño habitual a las cuestiones de Santander. Dejar algo para su sucesora en el cargo. Porque Gema Igual repasó todas las actuaciones conjuntas que el Ayuntamiento desarrolla junto a la Autoridad Portuaria y el ministro le puso fecha a una de las más 'visibles' para los ciudadanos. El derribo de las naves de Antonio López depende del tiempo que el Puerto tarde en trasladar las dependencias que tiene allí. «Espero que a comienzos de 2018 ya tengamos las primeras palas derribando las naves».