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Abel Verano
Martes, 5 de enero 2016, 19:50
El cortejo real de Sus Majestades de Oriente llegó este año a Laredo en vagones de tren procedentes de Oriente. Desafiando al aire frío que corría por la villa pejina, el desfile partió del colegio Villa del Mar y atravesó la calle Marqués de ... Valdecilla para dirigirse a Ignacio Ellacuría, a la calle Marqués de Comillas, a la Avenida de Cantabria, a López Seña y a la Plaza Cachupín. Cientos de niños, acompañados de sus padres, aprovecharon para coger alguno de los caramelos que los pajes y reyes fueron arrojando a su paso. El tren se dirigió por la Avenida de España hasta la sede del Ayuntamiento, donde los Reyes Magos saludaron a los asistentes. Además, y como es tradición en la villa laredana, los Reyes Magos, cargados de regalos, se dirigieron al Hospital Comarcal de Laredo y a la Residencia de Mayores para saludar a quienes se encuentran en ambas instituciones.
En Castro Urdiales, Melchor, Gaspar y Baltasar desfilaron abordo de tres carrozas confeccionadas por Quintana y Amigos, ganadores en varias ocasiones del Coso Blanco. Abrió la comitiva una carroza infantil a la que precedieron las tres de Sus Majestades. Hasta mil kilos de caramelos se repartieron entre el numeroso público asistente. Por recomendación del servicio de Emergencias Castro y ante el temporal que se anunciaba, se cambió el lugar de recepción de los Reyes Magos y se llevó a cabo en el Polideportivo Pachi Torre, donde finalizó el desfile que partió de Ocharan Mazas y atravesó la Avenida de la Constitución, Melitón Pérez del Camino, Hurtado de Mendoza, La Ronda y Victorina Gainza.
Colindres
La magia de los Reyes Magos llenó las calles de Colindres. Sus majestades salieron desde el Ayuntamiento y desde allí emprendieron su desfiles por las diferentes calles del municipio. También los nervios, risas e ilusión de los pequeños acompañaron a los Reyes Magos y a su comitiva ante la llegada de tan ilustres y esperados invitados.
Este año sus Majestades hicieron un recorrido ligeramente diferente al de años anteriores, que finalizaban su paseo en la carpa de Navidad. No ha habido carpa -las actividades se han realizado en el colegio Fray Pablo y en diferentes espacios del casco urbano- y se ha querido volver a los orígenes poniendo fin al recorrido de los Reyes Magos en la iglesia del Carmen.
Sus Majestades contaron en su comitiva con nada menos que seis carrozas y una vez acomodados en la iglesia recibieron con cariño a los niños de Colindres, a los que llenaron de dulces antes de adentrarse por la noche en sus casa para dejarles sus regalos.
Santoña
Cientos de niños miraban esta tarde a lo alto del monte Buciero donde unas luces anunciaron el descenso de los Reyes Magos a Santoña. Tras subirse a sus carrozas en la zona del Patronato pusieron rumbo a la iglesia con una comitiva real que brilló más que nunca ya que se estrenaron dos nuevas creaciones que despertaron la ilusión y la magia en los más pequeños.
El desfile se abrió con una enorme carroza con la forma de la tradicional carta que escriben los niños a sus Majestades, seguida de las tres plataformas con Melchor, Gaspar y Baltasar, arropados por pajes que portaban antorchas. La comitiva real se cerró con otra carroza nueva llena de grandes y coloridas cajas de regalos
Los Magos de Oriente realizaron, como es tradición, la ofrenda al Niño Jesús en el altar del templo y, seguidamente, se encaminaron al balcón del Ayuntamiento, donde dirigieron una palabras a los más pequeños que les miraban con rostros inocentes y asegurando que se habían portado bien. Para entonces cayeron unas gotas que no minaron la ilusión
La cabalgata tuvo su última en la plaza de San Antonio, donde los pequeños, tras una larga cola, pudieron subirse a las carrozas para saludar de cerca a su rey preferido. Fue el momento de contarles los regalos que habían pedido en sus cartas y llenar aún más sus manos con puñados de dulces caramelos.
Noja
Sus Majestades llegaron a la villa de Noja montados en sus dromedarios y acompañados por una comitiva real que incluía distintas escenas del Belén. En total, 20 grupos entre carros, animales, vehículos y los propios Reyes Magos qe no dejaron de saludar a los niños. El desfile arrancó a las seis de la tarde desde el cruce de Soano y bajó por la avenida Santander hasta la iglesia de San Pedro, donde Sus Majestades fueron recibidos por el párroco. Posteriormente, en la carpa de la plaza de la villa Melchor Gaspar y Baltasar se digirieron a todas las personas congregadas y, como es habitual, hubo música, caramelos y mucha diversión en la noche más mágica del año .
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