Cantabria, oro en la prueba de relevos del Nacional de Ciclocross

Lo atractivo de esta prueba viene por las distintas estrategias. Cada corredor hace una vuelta, pero el orden lo decide cada seleccionador. La mayoría de equipos apostaban por la experiencia para el inicio. «Nosotros pusimos a José Domingo Cadavieco, de la categoría máster 30 B», afirma el seleccionador regional, Fede Vuelta. La idea era, tras ese comienzo, colocar a los en teoría integrantes menos potentes del equipo para rematar con lo mejor que se tenía.

Cadavieco no lo hizo nada mal. Con un crono de 12:07, entregaba el testigo en primera posición a Sandra Trevilla. De las cinco selecciones participantes, llamaba la atención la gallega. Había comenzado con un élite masculino (Darío Otero), en teoría su mejor baza. Pero su crono de 14:11 ya lastraba mucho las posibilidades de su equipo.

Sandra Trevilla y Alain Suárez mantuvieron el tipo. Cantabria ocupaba tras sus postas la tercera plaza por detrás de Asturias y la por entonces primera, Cataluña. Fue la primera andanada de la traca final de los cántabros la que recortó distancias. El sub-23 Ángel Coterillo ya enjugó bastante tiempo a asturianos y catalanes. La faena la remató en el penúltimo giro Gonzalo Inguanzo, una de las grandes promesas de este deporte en España. El júnior se marcó la mejor quinta vuelta de todos los que estaban en el trazado y dejaba a Cantabria segunda, a 33 segundos de Asturias.

Faltaba el último relevo. Por los asturianos corría el máster 30 Agustín Navarro, todo un campeón del mundo en su categoría. Pero por Cantabria salía al ‘prao’ Kevin Suárez. Y aunque no llega a Legazpia tras su mejor curso, el corraliego está entre la élite del ciclocross patrio. El hasta mañana domingo vigente subcampeón nacional salió como una flecha y a medio circuito, «ya tenía cerca a Navarro», afirma Suárez. Tras tomar un poco de resuello, Kevin ponía la directa para dirigirse hacia la meta de Legazpia. Con cinco segundos de margen, el cántabro celebraba el título por sus otros cinco compañeros.

«Hemos acertado con la estrategia. Quien viene desde atrás hacia delante, como ha sido nuestro caso, se ve más fuerte», señala Fede Vuelta. La empresa no fue para nada fácil en un circuito que se auguraba duro y que no ha defraudado las expectativas. «Se ha hecho muy largo y muy duro», señala Kevin Suárez. «Había mucho barro, que se pegaba mucho a la bici. Sería hasta mejor que lloviese, para que se hiciese algo más líquido y que no se pegase tanto el barro a la bici»