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Álvaro San Miguel
Miércoles, 31 de agosto 2016, 14:59
Algunos pasaron la noche en tiendas de campaña. Otros subieron durante todo el día andando o en bici. De una manera u otra, miles de aficionados cántabros y de comunidades vecinas han subido al puerto que domina la bahía de Santander para animar a sus ... favoritos o, simplemente, para vivir de cerca el gran espectáculo del ciclismo. La presencia del 'gorrión de Cazoña', Ángel Madrazo, entre los escapados, caldeó aún más el ambiente. La posibilidad de que el cántabro del Caja Rural fuera el primero en coronar el puerto puso en pie de guerra a los aficionados cántabros que preparaban el pasillo en las rampas de Peña Cabarga.
La primera etapa cántabra (el jueves, en la segunda, el pelotón saldrá de Los Corrales de Buelna camino de Bilbao) ha sido testigo de un nuevo duelo entre el maillot rojo, el escalador colombiano Nairo Quintana (que hace quince días ya se probó en las duras rampas de Peña Cabarga) y el contrarrelojista Chris Froome, tres veces ganador del Tour. El británico ya ganó en 2011 al cántabro Juanjo Cobo en la cima de Peña Cabarga por tan solo un segundo de diferencia.
Móviles, tablets, radios... todo ha valido para seguir el desarrollo de la etapa desde la cuneta en el último kilómetro de la subida a Peña Cabarga.
A 500 metros de la meta, el presidente cántabro Miguel Ángel Revilla esperaba la llegada de los ciclistas desde una de las tribunas preparadas para las autoridades.
El cántabro Ángel Madrazo lo ha intentado hasta el último momento. Ha aguantado el tirón durante toda la escapada y ha llegado a encabezar la carrera al comienzo de la subida a Peña Cabarga. Pero las piernas no han estado a la altura del corazón del 'gorrión de Cazoña', que ha terminado cediendo la iniciativa a los dos favoritos: el líder Nairo Quintana y el británico Chris Froome. El tres veces ganador del Tour de Francia ha repetido la hazaña de 2011, cuando derrotó en casa al cántabro Juanjo Cobo -a la postre ganador de la Vuelta ese año-. El escalador colombiano no sólo ha retenido el maillot rojo, sino que ha aguantado el tirón de Froome y no ha cedido ni un segundo de ventaja al británico.
Los miles de cántabros que han vivido la etapa en las rampas de Peña Cabarga se van a casa con el buen sabor de boca de ver a los dos favoritos peleando en la escalada al puerto y con la alegría de haber soñado por un momento con una victoria cántabra en el gran mirador a la Bahía de Santander.
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