Borrar
La Albericia volvió a ser el inicio de una nueva pretemporada del Racing. Su césped acogió las primeras carreras.
Las agujetas se mezclan con las dudas
Racing /fútbol

Las agujetas se mezclan con las dudas

Granero y Fede, lesionados, vieron a sus compañeros desde la banda, mientras que Borja y Koné se incorporarán en los próximos días

Marcos Menocal

Martes, 14 de julio 2015, 08:01

Las agujetas de los primeros días de una pretemporada no entienden de dudas. Aparecen siempre. Punto. Quizás lo único que les asemeja a ambas es que a medida que pasa el tiempo desaparecen. El esfuerzo físico periódico aplaca a las primeras y el trabajo en los despachos disipa las segundas. Ayer en La Albericia 23 futbolistas dieron sus primeras carreras. Borja Granero y Fede San Emeterio, lesionados, siguieron el entrenamiento de sus compañeros desde la banda, mientras que Koné tiene permiso para regresar más tarde y Borja San Emeterio está disputando el Europeo sub 19 en Grecia, donde ayer se clasificó para las semifinales.

Entre esos 23 estuvieron Francis e Iñaki, 'supervivientes' de la pasada temporada; los cuatro fichajes (Dani Rodríguez, Alain Álvarez, Mohamed Kamal y Mohamed Coulibaly) y un ejército de 17 canteranos.

Pese a que la sesión inaugural duró poco más de una hora, alguno sentirá hoy un pequeño hormigueo muscular. Es normal. El cuerpo se queja. Mañana apenas será inapreciable y el jueves tan solo será un mal recuerdo. Las otras, las dudas de este Racing que arrancó ayer tardarán un poco más en desaparecer. Para ello, el presidente, Manolo Higuera, que se acercó a La Albericia para saludar a los protagonistas, no descansa. Esta vez es el césped el que depende de los despachos y no al revés, como manda la norma. «Trabajo con la cabeza puesta en Segunda B», aseguró Pedro Munitis en su primera rueda de prensa de la nueva campaña. La incertidumbre no es propia de los futbolistas -ellos solo se preocupan de entrenar- y su técnico parece tener las cosas muy claras .

Otros años el equipo se hace esperar más tiempo. Tan solo duró quince minutos la charla en el vestuario. Es cierto que no hacían falta muchas presentaciones; con mayoría de jugadores de la casa, los saludos acabaron rápido. En fila india salieron de la caseta y se fueron al centro del campo. Allí rodearon a Munitis y a su cuerpo técnico: Gonzalo Colsa, Javier Pinillos, David Casamichana, Borja Brea y Manuel Crespo, una apuesta de última hora del míster. Se trata de un especialista en trabajo de recuperación y fuerza. Sus métodos han pasado el filtro y el del Barrio Pesquero quiere poner sus conocimientos al servicio de sus futbolistas. Sus hombres de confianza.

A los que ayer repetían, el discurso les sonó familiar; a los nuevos, motivante; y a los chavales música celestial. Ojipláticos escucharon la primera arenga del año. Un batallón de jóvenes. 17 de ellos no habían nacido cuando el que desde ayer será su entrenador debutaba en Primera (22 de febrero de 1995). Y lo hizo con la camiseta verdiblanca que todos aspiran a vestir. «Tenéis las mismas oportunidades». Este fue el resumen de su charla. Paulino Miguélez (16 años), Soberón (18), José Miguel (17) y Javier Gómez (17) son los más precoces, todavía en edad juvenil, pero del resto de los chavales ninguno supera los 20. Son un melón sin abrir, pero en el Racing de las dudas todos parten de cero. El tiempo dictará sentencia como lo hizo el año pasado, cuando tres imberbes canteranos -los hermanos San Emeterio, Fede y Borja, y David Concha- se convirtieron en imprescindibles en el campo y en activos del club. El zurdo, traspasado a la Real Sociedad, le ha supuesto a la entidad más de un millón de euros.

Los nuevos, el reclamo

Después del discurso comenzó el trabajo. Primero una suave carrera continua y luego ejercicios de posesiones con balón. Los poco más de cuarenta aficionados que siguieron desde la grada el entrenamiento buscaban con la mirada a los fichajes. El color de la piel de Coulibaly les facilitó las cosas; al senegalés se le vio fuerte, robusto y contento. Habla inglés y francés, por lo que tendrá una labor más por cumplir en su fase de adaptación. Kamal también mostró una apariencia rocosa, con un gran tren inferior. Dani Rodríguez, más estilizado, y Alain, con su 1,86 metros, fueron también el punto de mira. Apenas se les pudo ver algo, puesto que la intensidad de la sesión no lo permitió, pero tiempo habrá. Ellos son los primeros de una larga de lista de nombres llamados a estrenarse con la camiseta racinguista. Por la tarde el club oficializó un nuevo fichaje, el de Chus Hevia.

No por habitual deja de ser preocupante e intrigante que la plantilla eché a rodar tan en precario. Al menos falta un central, tres hombres de banda y dos delanteros, siempre y cuando Iñaki (que le ha pedido al club negociar una salida) y los hermanos San Emeterio y Koné, con pretendientes preguntando por ellos, continúen en el equipo. De todos los presentes, ayer, a tres futbolistas les latía aún más alterado el corazón: Viorel, Puras y Peón. Los tres son porteros y el equipo no tiene ninguno en nómina. Saben que uno, al menos, es probable que esté ante su gran oportunidad. Así les ocurrió a Pedro Alba, Paco Liaño, Mario...

Las pruebas médicas se dejarán para la semana que viene. Desde hoy las dobles sesiones diarias serán la tónica habitual hasta que la Liga comience. Mucho trabajo de fuerza y potencia en el gimnasio y físico con el balón. Con Munitis es probable que las largas sesiones de carrera por el monte pasen a mejor vida. El fútbol ha cambiado.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes Las agujetas se mezclan con las dudas