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Aser Falagán
Jueves, 7 de enero 2016, 07:16
Pumpido se convertirá esta misma mañana en nuevo jugador del Racing tras la pertinente firma de su contrato, un trámite indispensable que no impide que ya se le considere de facto futbolista del club. Y todo pese a que incluso en circunstancias similares existen precedentes de jugadores que no llegaron a firmar por algún desacuerdo de última hora o por no superar el reconocimiento médico. «Voy a marcar muchos goles», comentaba ayer mientras llegaba a Santander un jugador que no ocultaba su satisfacción por fichar por un equipo español. Su llegada al Racing supone una gran oportunidad para intentar ingresar en la élite desde la Segunda B si consigue el objetivo del ascenso con el equipo verdiblanco.
Uno de esos casos fue el de Thiago Motta, que cuando en 2009 estaba a punto de convertirse en nuevo futbolista del Racing vio cómo las conversaciones se venían abajo y dejó Santander con la misma celeridad con la que había llegado. Oficialmente se adujo que no había superado las pruebas médicas, pero siempre sobrevoló la sospecha de una falta de acuerdo en torno a las comisiones.
Hoy no debe suceder lo mismo. Facu Pumpido cogió ayer -hora española- un vuelo desde Buenos Aires que aterrizó en Madrid a las cuatro y media de la tarde. Desde allí se trasladó por carretera a Santander, a donde llegó hacia las ocho y media. Sin tiempo para mucho más, pasó la noche en el Hotel Palacio del Mar, junto a los Campos de Sport, y hoy se someterá al reconocimiento médico en el Igualatorio Cantabria, en Mompía, para -de superarlo- firmar acto seguido su nuevo contrato como jugador del Racing en las oficinas del club, en El Sardinero.
Pumpido se incorpora al Racing en propiedad después de que el club cántabro llegara a un acuerdo con su equipo de origen, el Acassuso, que le dio la carta de libertad a cambio de un traspaso que no se cerró hasta el martes por la noche, en horario español. El sobrino del Nery Pumpido, campeón del Mundo en México 86, será así jugador verdiblanco al menos hasta el 30 de junio, si bien su contrato contemplará la ampliación de su compromiso durante al menos una temporada más si el Racing asciende a Segunda División.
Durante los últimos meses, Facundo Pumpido (Buenos Aires, 21 de octubre de 1988) ha jugado en el Atlético San Martín argentino como cedido por el Acassuso. Ha sido su primera gran etapa en la máxima categoría argentina, a la que la ampliación a treinta equipos le ha permitido acceder después de completar la mayor parte de su carrera en Primera B. Durante esa corta estancia en Tucumán ha jugado catorce partidos y marcado tres goles, el más celebrado el que le hizo a River en el Monumental. Además, su salto a España será su segunda experiencia internacional, después de una breve y fallida etapa en el modesto Avaí Futebol Clube brasileño.
Largo viaje
Tras llegar a España alrededor de las cuatro de la tarde, el club ya había preparado el desplazamiento en coche del porteño hasta Santander, y a su llegada a Cantabria fue el delegado del equipo, Delfín Calzada, quien ejerció como cicerone, como será también el encargado de coordinar la pequeña gira que le espera hoy al argentino, con escalas en Mompía, los Campos de Sport y La Albericia.
Con la incorporación de Pumpido, Pedro Munitis tendrá al fin alternativas en un puesto fundamental: el de delantero centro, una demarcación en la que Dioni era hasta ahora el único especialista disponible. Todas sus eventuales ausencias, en especial en una primera fase de la temporada en la que no había alcanzado su mejor forma, tuvieron que ser suplidas por soluciones de urgencia, puesto que ni Coulibaly ni Isma Cerro ni Migue García son delanteros puros de área. También tuvo que asumir ocasionalmente esta función Chus Hevia, que tras la llegada del porteño ve cómo se le cierran más aún las puertas del equipo y que podría dejar el Racing en este mercado de invierno.
El fichaje del argentino cierra, en principio, el capítulo de fichajes para el Racing en lo que a incorporaciones se refiere, después de que a finales de diciembre se concretara la del central Jon García. El club no hará más movimientos -salvo que se presente una gran ocasión- pese a tener todavía un mes por delante, pero sí que se podría producir alguna baja, como la del atacante asturiano.
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