Los caminos del Racing hacia el ascenso

El partido de Reus se antoja un mero trámite. Todo lo demás, sería un milagro. Una gesta histórica para el Racing. Pero, ya que el encuentro debe jugarse de todas formas, todavía quedan aficionados que confían en que su equipo dé una imagen de superioridad que apenas ha mostrado a lo largo de la temporada. Los cántabros necesitan un 0-3 para empatar la eliminatoria y, al menos, un 1-4 para lograr el ascenso directo a Segunda División. En ese caso, el conjunto verdiblanco, una vez con el pasaporte para el salto de categoría en su mano, disputaría un último y prácticamente inútil compromiso para dilucidar el campeón absoluto de Segunda División B, ante el ganador del enfrentamiento entre UCAM Murcia y Real Madrid-Castilla los murcianos vencieron 2-1 en la ida.

Sería un sueño, la verdad. Por eso, ya antes de que el Racing trate de hacer la machada en Reus domingo, 18.00 horas muchas miradas están puestas en el sorteo de la segunda eliminatoria, que se celebrará el próximo martes, 31 de mayo, en La Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Sería la segunda oportunidad que el Racing se ganó sobre el césped tras quedar como primero de grupo. Los cántabros, en esa repesca, entrarían en el bombo con el otro perdedor de los campeones de grupo y los ganadores de la primera eliminatoria entre segundos, terceros y cuartos.

La condición de campeón de los racinguistas aporta más ventajas en la continuación de la lucha por el ascenso. En ese hipotético segundo round, el Racing quedaría emparejado con uno de los cuartos clasificados supervivientes. En caso de que estos hayan quedado eliminados, o el agraciado haya sido el otro primero antes, los de Pedro Munitis se enfrentarían a un tercero. Eso sí, el rival siempre sería de otro grupo, nunca del I, donde el Racing ha estado encuadrado durante la competición regular. Además, para los verdiblancos la vuelta sería, en cualquier caso, en los Campos de Sport. Otra ventaja más. La ida se disputaría el 4 o 5 de junio y el desenlace, el 11 o 12. Los posibles rivales a batir: Lleida, Cádiz y Toledo, o, en su defecto, Sevilla Atlético, Socuéllamos y Hércules.

A estas alturas, ganar es una obligación, ya que no existen terceras oportunidades para nadie. Si el Racing alcanza la tercera eliminatoria, ahí va la vencida. Solo cuatro equipos quedarán vivos para entonces. Yel sorteo será puro, con la única excepción de que los cántabros no podrán verse las caras con el otro campeón. Pero sí con equipos de su grupo. La ida está prevista para los días 18 y 19 de junio, mientras que en la vuelta, que en cualquier caso el Racing disputaría de nuevo como local, está fechada para el 25 o 26 de junio.

Optimismo

En el vestuario siguen siendo optimistas de cara a un posible ascenso del Racing, sea por la vía que sea. De hecho, al menos de puertas hacia fuera, los jugadores verdiblancos afirman no rendirse pese al varapalo del domingo, y buscarán darle la vuelta al marcador en Reus. Como discurso, suena muy bien, mas lo complicado será verlo reflejado sobre el césped. El guardameta cántabro Óscar Santiago aseguró al término de la sesión a puerta cerrada de ayer que el equipo afronta el choque «con muchas ganas de quitarnos la espina del encuentro de ida. Iremos con todo para intentar la remontada». Además, destacó «el apoyo incondicional de la afición. Es ejemplar. Sabemos que no nos van a abandonar nunca, van a viajar a Reus para acompañarnos y se lo queremos agradecer con un buen resultado».

Mientras tanto, en Reus no quieren hablar de pescado vendido, porque son conocedores de que la relajación puede ser su peor enemigo de cara al choque del domingo. Rojinegros y verdiblancos saben que cambiar el signo de la eliminatoria es una misión casi imposible, pero ambos contendientes se encuentran preparados por lo que pueda pasar. Cosas más raras se han visto en el fútbol.