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Isabel Arozamena
Lunes, 23 de mayo 2016, 13:13
Por la situación de Quesería Lafuente, con plantas de fabricación de queso de leche de vaca y de cabra en Asturias, Murcia e Italia, además de las dos existentes en Cantabria, la incidencia de la situación que vive la región en esta industria es menor.
Ante las subvenciones públicas que se conceden a empresas en crisis, José María Lafuente es más partidario de «ayudar a las que van bien, no a las que van mal». De los políticos poco espera «más allá de la repetida frase que se produce cada vez que hay nuevo Gobierno de que hay que cambiar el modelo productivo», algo que, a su juicio, «no tienen ni idea de lo qué es».
Lafuente demandó, para que las compañías cántabras puedan desarrollarse, una planificación. «Hay que tener un plan», destacó, porque sin él «una empresa de mala manera va a subsistir o seguir adelante». Por ello, como primer paso consideró imprescindible que se definan «las fortalezas que tiene Cantabria» para incidir en ellas, incluyendo la construcción y el turismo.
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