Cuarenta y ocho oficinas de Liberbank operan ya como agencias financieras

En un comunicado, la entidad explicó que este nuevo modelo constituye una primera oleada de transformación de su red rural, que continuará en los próximos meses.

Este nuevo modelo, que comenzó a implantarse en el último trimestre del pasado año y que de momento ha afectado a sucursales de Asturias, Cantabria, Extremadura y Castilla-La Mancha, responde a la iniciativa comercial de adaptarse a los factores geográficos y socioeconómicos así como mejorar la atención prestada a sus clientes, ha añadido Liberbank.

Los agentes financieros que operan en estas sucursales son un equipo humano con conocimientos y experiencia en la prestación de servicios bancarios.En Cantabria, este modelo ya ha permitido transformar en agentes financieros las sierte oficinas antes mencionadas.

Todas las operaciones

Liberbank explicó en su nota que todas las oficinas tienen capacidad para realizar todas las operaciones bancarias, disponen de sistemas y herramientas de gestión, y han optado por desarrollar un plan de negocio autónomo de la actividad que antes llevaba a cabo el banco.

Este modelo, tal y como ha destacado la propia entidad, supone un beneficio tanto para los clientes, porque se les garantiza la cobertura, como para los agentes financieros y Liberbank, ya que gracias a ellos la entidad puede continuar teniendo presencia en estas zonas.

Liberbank anunció en junio del año pasado que tenía la intención de traspasar a agentes financieros el negocio de unas 150 oficinas, la mayoría del ámbito rural, que entraba dentro de su plan de ajuste que ha negociado con los sindicatos y que está suponiendo una importante reducción de plantilla.

Según explicó la entidad en su día, los agentes financieros deberán tener dotes de liderazgo y un cierto arraigo social en cada localidad, claves para gestionar y captar negocio según sus propios objetivos y las necesidades de los clientes, pero sin depender orgánicamente de Liberbank. En cuanto a los producto que ofrecerán estos franquiciados serán los del propio banco, preservando la imagen de marca del grupo, al tiempo que deberán aplicar un modelo de atención y servicio acorde con los estándares de la entidad.