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D. C.
Domingo, 12 de febrero 2006, 01:00
El Teka Cantabria se quedó lejos de la sorpresa y reanudó la liga con una derrota previsible en la pista del líder, el Barcelona-Cifec. Pese a las bajas de algunos jugadores importantes en el esquema del Barcelona, como Barrufet, Skrbic, Iker Romero y Jeppesen, el equipo cántabro sólo pudo aguantar 45 minutos delante de un rival liderado por los lanzamientos, del reciente campeón de Europa, Jerôme Fernández y por los rápidos contraataques de otro medallista europeo, Juanín García, que estuvo impecable en los uno contra uno.
Alberto Urdiales también notó la ausencia de su hermano Santi y de Ben Amor, mientras que el acierto de Milosavljevic en el extremo fue insuficiente para romper la defensa 5-1 de los locales. Un parcial inicial de 0-2 hizo pensar en una posible sorpresa, pero el Barcelona en seguida respondió con un 3-0 que encarrilaba el partido (5-3). Pero el Teka nunca bajó nunca los brazos. Urdiales probó una defensa mixta muy presionante sobre Jerôme Fernández para intentar frenar la primera línea rival y el equipo llegó a la media parte con sólo tres goles de desventaja, aprovechando un serie de pelotas pedidas por el Barcelona en las últimas posesiones de la primera parte (14-11).
Fue en el segundo período cuando los locales, ayudados por dos exclusiones prácticamente consecutivas de Río y Lamadrid, sentenciaron definitivamente el encuentro. El Teka no pudo contar en esta ocasión con los goles de Gautschi, que estuvo bastante desacertado en los pocos lanzamientos que intentó, mientras que Brajkovic tuvo que cargar con todo el peso en el primera línea.
En los momentos de inferioridad numérica, además, los cántabros no pudieron hacer nada para neutralizar la avalancha ofensiva de los azulganas. Las intervenciones de Peric, muy seguro bajo los palos -Urdiales, en cambio, tuvo que alternar a Díaz y Manolo López sin encontrar el acierto esperado- marcó las diferencias en los momentos más delicados y un parcial de 4-0 acabó con las esperanzas del Teka (27-20), que a partir de la próxima semana ya podrá continuar pensando en su liga. En los últimos minutos, Milosavljevic evitó una derrota mucho más amplia aportando un total de once goles. Con el partido sentenciado Urdiales dio minutos a Jalkidis, que había llegado al partido con molestias.
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