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V. S.
Jueves, 2 de marzo 2006, 01:00
El helipuerto de Ruente ya está operativo, si bien las adversas condiciones climatológicas de este invierno han impedido a la Consejería de Ganadería, responsable del proyecto, concluir las obras. Con el helicóptero que incorpora la instalación, Cantabria cuenta con un segundo aparato de este tipo destinado a emergencias, ya que hasta el momento sólo se contaba con el de Protección Civil. Sacar adelante el plan ha supuesto un desembolso de 393.640 euros.
Ayer, el titular de Ganadería inauguró la instalación de Jaedo, que servirá de apoyo a los efectivos de la Dirección General de Montes en las labores de extinción de incendios forestales. El helicóptero disponible es un modelo PZL-SOKOL biturbina, con una capacidad de transporte de 13 personas y un helibalde con capacidad para lanzar 1.500 litros. El aparato con que cuenta Protección Civil no era adecuado para el transporte de brigadas.
La Dirección General de Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente ha designado para este helipuerto una Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales, BRIF, compuesta por personal altamente especializado, al mando de la cual se sitúa un ingeniero de montes. La BRIF se completa con dos jefes, dos capataces de cuadrilla, 15 brigadistas, dos técnicos de base y dos emisoristas de base. Su cometido estará centrado en la extinción de incendios en un radio de 50 kilómetros alrededor de la instalación y también se podrá requerir su concurso siempre que haya incendios de gran superficie situados a mayor distancia de la citada.
Las obras del helipuerto concluirán en breve, con su cierre perimetral y el remate del edificio principal.
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