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CONSUELO DE LA PEÑA
Martes, 3 de octubre 2006, 11:08
'Miguelín' no está solo. Más de un centenar de presos de la Prisión Provincial de Santander se han solidarizado con él, firmando un escrito en el que piden a la autoridad judicial que saque del centro penitenciario a este joven de 20 años, que sufre un trastorno límite de personalidad, y procure su traslado a un institución cerrada adecuada a su enfermedad mental.
Miguel Carral Martínez se encuentra en prisión desde el pasado 24 de agosto. Ese día abordó a una chica que se encontraba en el interior de una cabina de teléfonos y, tras mostrarle una navaja, se llevó su bolso. Era una de las fechorías que 'Miguelín', apelativo con el que se le conoce en Bezana, donde vive, había cometido. Pero 'Miguelín', ya lo dicen los jueces, no es un delincuente al uso, es un enfermo mental, un chico que sufre un trastorno límite de personalidad consecuencia del atropello que sufrió siendo un niño, cuando un conductor borracho se lo llevó por delante sin miramientos.
Y porque los jueces creen que la cárcel no es lugar para saldar su deuda con la justicia, ordenaron en una sentencia firme dictada el pasado 14 de septiembre que cumpliera la pena en el centro cerrado 'Los Delfines', situado en Medina de Pomar. Pero esta institución no le quiere y ha rechazado su ingreso.
El joven se encuentra internado en la sección de menores, con los reclusos de entre 18 y 21 años. En la Prisión Provincial, centro situado en la calle Alta de santander, los reclusos han tomado conciencia con el caso de este muchacho y se han solidarizado de forma casi unánime con 'Miguelín'. De los 163 internos que hay en la cárcel, 109 han firmado un escrito, redactado por uno de ellos, en el que solicitan al juez que le condenó que saqué al chico del centro por no ser adecuado para él. «Con este escrito quiero rogarle una revisión del sumario de Miguelín y, también para que mi conciencia quede tranquila de lo que estoy haciendo; defender a una persona indefensa. Le hago llegar estas firmas y el apoyo de todos los internos de esta prisión sin el mayor interés personal, sólo queriendo conseguir un sitio mejor para Miguelín (sic)».
«Llevo aquí casi año -continúa la misiva- y lo único que he podido ver y comprobar es que no es el sitio idóneo para una persona como Miguelín, que se deja dirigir por los demás, influencias y hace todo lo que le mandan, es decir, que no es responsable de sus actos por su trastorno mental y por falta de personalidad... Aquí dentro lo único que puede aprender es a ser más delincuente y a drogarse cada vez más, porque esa palabra de reinseerción no existe en estos centros, créame».
«Soy una persona que no he probado la droga, ni he robado; estoy aquí por un accidente que no supe afrontar en ese momento, pero me doy cuenta que aquí puedo traficar y delinquir si tuviese falta de personalidad. Agradezco a Dios no deje que abandone mis principios...».
El interno, que acompaña el escrito de 109 firmas, asegura que a Miguelín «le han violado y se ríen de él continuamente. Estoy seguro que lo que haya hecho no ha sido de su propia voluntad, tan sólo de unos listos que le empujaron a hacerlo. Con esto no quiero defenderle, ni justificar sus actos. Lo que quiero es que se revise su estado psicológico y se compruebe que no es igual que los demás».
Multa por beber
Por otro lado, los padres del muchacho no han recibido comunicación institucional alguna para acoger al chico. Si se ha puesto en contacto con ellos el Ayuntamiento de Bezana...para enviar a prisión al joven una multa de 180 euros por beber en la calle.
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