Industria deniega a Caelgese el permiso para la central térmica en Sniace

El Ministerio de Industria ha denegado a Caelgese, participada por Sniace y la belga Electrabel, la autorización para la construcción de la central termoeléctrica de ciclo combinado de 800 megawatios, en terrenos colindantes a la fábrica que afectan a los municipios de Torrelavega y Santillana del Mar. La denegación se basa en un informe emitido en noviembre de 2006 por la Secretaría General para la Prevención de la Contaminación y el Cambio Climático, que estima que el proyecto «no puede considerarse compatible con el cumplimiento de los límites establecidos» para los niveles de contaminación. Así se publicó ayer en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC), donde también se indicó que contra esta resolución cabe recurso de alzada ante la Secretaría General de Energía en el plazo de un mes.

Se considera que la central promovida por Caelgese elevaría los valores de contaminantes por dióxido de nitrógeno (NO2), dióxido de azufre, dióxido de nitrógeno, óxidos de nitrógeno, partículas, plomo, benceno y monóxido de carbono. También se señala que el proyecto no es compatible con el cumplimiento de la legislación vigente en materia de ruido, y que el trazado propuesto para la línea eléctrica de evacuación no es viable por su proximidad a viviendas y edificaciones.

La resolución de la Dirección General de Política Energética y Minas, perteneciente al Ministerio de Industria, fue adoptada el pasado 13 de noviembre de 2006 tras analizar los distintos informes emitidos al respecto tras la petición formulada por Caelgese. La decisión de Industria es similar a la adoptada el pasado julio por el Ministerio de Medio Ambiente, que rechazó la construcción de la central al estimar que el proyecto no es compatible con la normativa sobre vertidos contaminantes, además de no ser viable el trazado de la línea eléctrica por estar próxima a viviendas. El proyecto desestimado consiste en la construcción de una central de ciclo combinado de 800 MW de potencia nominal eléctrica está promovida por las empresas Caelgese (filial de Sniace) y la multinacional belga Electrabel. Los promotores justificaron el proyecto en la necesidad de cubrir la tendencia creciente de la demanda de electricidad con tecnologías que permitan la generación de energía en las mejores condiciones medioambientales posibles y que permitan garantizar un suministro a la zona.

Valoración sindical

«Es una noticia que no nos coge de sorpresa». Con estas palabras el secretario y portavoz del Comité de empresa de Sniace, José Antonio Pérez Portilla, reconoció ayer no estar sorprendido por la decisión del Ministerio de Industria de denegar a Caelgese, participada por Sniace y la belga Electrabel, la autorización para la construcción de la central termoeléctrica de ciclo combinado de 800 megawatios. El sindicalista recordó que este proyecto estaba casi descartado por la empresa desde que, hace ya casi seis meses, el Ministerio de Medio Ambiente desestimó la construcción de la planta. «Desde entonces, y aunque la empresa no haya comunicado oficialmente que abandonaba el proyecto, lo cierto es que no se había vuelto a hablar de él», afirmó Portilla, quien señaló, por último, que desde entonces, Sniace «ha centrado sus esfuerzos en tramitar la construcción de la planta de biofuels». El procedimiento para la tramitación de evaluación de impacto ambiental se inició en octubre de 2001, al recibir el Ministerio de Medio Ambiente la memoria-resumen del proyecto, y concluye ahora al desaconsejar su construcción por los problemas ambientales que generaría. El comité de empresa considera que Sniace ya tenía prácticamente descartado el proyecto