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MERCEDES RODRÍGUEZ
Lunes, 15 de enero 2007, 13:37
El Congreso de los Diputados nombrará este lunes a los doce nuevos consejeros de la recién nacida Corporación RTVE. Entre ellos se encuentra el periodista Luis Fernández, que será el presidente de la empresa pública. No hay vuelta atrás, se abre una nueva era que deja atrás el extinguido ente público, un histórico paso que distintos Gobiernos pretendieron realizar y que siempre quedó pendiente.
El 'contador económico' marcará cero ya que la deuda -7.800 millones de euros- se traslada al Estado, al tiempo que la ley impedirá al grupo la vuelta al endeudamiento. Quedan nuevos pasos para culminar la reforma, tal como marca la ley, entre ellos despejar la incertidumbre sobre limitación de publicidad en TVE.
Casi tres años antes, la directora general saliente, Carmen Caffarel, fue nombrada por el Gobierno de Zapatero para diseñar esta reforma en la gestión interna, mientras el Parlamento tramitaba la ley de reforma de la radio y la televisión de titularidad estatal, que fue aprobada el 11 mayo del año pasado.
El plan de saneamiento y la regulación de empleo impuestos por el Gobierno como salida necesaria para subvencionar el grupo público se realizó con éxito ya que se sumaron al ERE más de los 4.150 previstos, empleados de más de 50 años que irán abandonando escalonadamente sus puestos de trabajo. Entre ellos se encuentran toda una generación de reporteros y periodistas acreditados que pasarán el testigo a nuevas generaciones.
Dentro de los trámites previstos por la ley, el movimiento siguiente corresponde al Parlamento. El Congreso tendrá que aprobar en los próximos meses el mandato marco, que tendrá una duración de 9 años, en el que se definirá el servicio público, sus líneas maestras y obligaciones. «Será definitivo para establecer la futura financiación del grupo público», señalan fuentes del grupo socialista. Posteriormente, el Consejo de Administración de RTVE y el Gobierno firmarán un contrato-programa por un plazo de tres años en el que se concretará la financiación, «la cuantía económica necesaria para el servicio público que se marque». Si los plazos se cumplen, este contrato-programa estaría listo para ser incluido dentro de los Presupuestos Generales para 2008.
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La publicidad sigue siendo el caballo de batalla en la actual Corporación. Si bien la nueva ley establece que la publicidad tendrá «restricciones adicionale» a los 12 minutos por hora que están vigentes para todas las cadenas, en el Gobierno no han despejado las dudas sobre esta disminución, a la que se comprometió el Ejecutivo con los operadores privados. El presupuesto de RTVE para este año asciende a 1.209 millones de euros. De esta cantidad, 436 millones corresponden a la subvención directa del Estado, mientras que 768 millones se captarán a través de publicidad y otros ingresos comerciales.
La directora general saliente, Carmen Caffarel, se refirió recientemente a una reducción «cualitativa» en programas de servicio público, como infantiles o proyección de películas europeas. En el mismo sentido se pronuncian en las filas socialistas, si bien el contrato-programa despejará dudas sobre la necesidad de la cadena pública de recurrir a la publicidad.
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