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N. CAVIA
Lunes, 25 de junio 2007, 02:50
Los alumnos más pequeños del centro La Salle de Los Corrales de Buelna tienen una cita cada tres meses con la biblioteca municipal. Es el tiempo que tienen para leer los libros que recogen y, después, dejarlos en su siguiente visita a la biblioteca.
Esta actividad viene realizándose desde hace más de cinco años dentro de las iniciativas del colegio y la biblioteca por fomentar el gusto por la lectura entre los más pequeños. En La Salle, los alumnos que comienzan el tercer curso de Educación Infantil realizan su primera visita a la biblioteca. Aquellos que aún no son socios llevan sus datos y formalizan en ese momento su inscripción. A partir de ahí, comienza una relación trimestral que, según los profesores, se compagina perfectamente con su labor de acercamiento a la lectura en el colegio. Pero la pasada semana se despidieron de la biblioteca hasta septiembre. Terminó el curso y realizaron su última visita de la temporada, en esta ocasión sólo para dejar sus últimos libros y para entregar a las bibliotecarias regalos que habían realizado para una ocasión tan especial.
La labor, para el resto del verano, queda ahora en manos de los padres, y son muchos de los que se han hecho socios de la biblioteca para compartir la afición de la lectura con sus hijos.
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