Marcelino pide más jugadores

Será porque Marcelino García Toral, el nuevo técnico del Racing, es un recién llegado y aún no está acostumbrado al peculiar 'estilo' que el club sigue en su política de fichajes; será porque faltan tres semanas para que comience la Liga y aún le falta medio equipo. El caso es que el entrenador dio ayer el primer toque a los responsables de la entidad. Una vez concluida la sesión de trabajo de ayer en La Albericia, y después de avanzar lo que serán las líneas maestras del Racing que se imagina (mantendrá el 4-4-2 y modificará la «idea de juego» del pasado año, obligado por la ausencia de Zigic), al preparador no le quedó más remedio que reconocer que los refuerzos no acaban de llegar.

«Es obvio que ahora mismo el equipo necesita no uno ni dos, sino bastantes fichajes si queremos afrontar con garantías la Primera División», declaró ante los periodistas.

Vuelven los nervios

Para los aficionados, en cambio, la situación resulta familiar a fuerza de repetirse año tras año, algo que no evita los cíclicos nervios ante el inicio de la temporada.

Hasta el momento, son sólo tres los nuevos hombres llegados a Santander, dos de ellos libres y otro cedido, y aún faltan por cubrir los puestos fundamentales. Sin un portero y dos delanteros de cierta garantía, no hay nada que hacer.

Mientras aguarda nuevos fichajes, el técnico sigue trabajando lo mejor que puede con lo que tiene. «Los jugadores van poco a poco cogiendo nuestras ideas y eso es muy positivo», reconoció. Ayer faltaron Zigic y De Abreu, ambos lesionados. El ariete serbio evoluciona favorablemente de su esguince de tobillo y el zaguero brasileño deberá estar dos semanas de baja al padecer un pequeño desgarro fibrilar en la unión miotendinosa proximal del bíceps femoral.

Juanjo, lesionado

Por otro lado, el ex racinguista Juanjo, ahora en las filas del Sevilla Atlético, debutó con mal pie. Hoy se conocerá el alcance de una lesión de menisco que padece el delantero y que podría mantenerle lejos del campo un mes, en el mejor de los casos, o hasta cuatro, en caso de que haya sufrido una rotura.