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«La página web está colapsada y es imposible reservar plaza a través de ella. He venido para resolverlo presencialmente, pero llevo aquí dos horas», explicaba Cristina Tirnauca, que se presentó en el complejo deportivo de La Albericia con el portátil a cuestas, con la esperanza de poder realizar la operación a través de internet y abandonar la cola. Una hilera que, en su momento de mayor saturación, alcanzaba el pabellón exterior del complejo, a 300 metros de la oficina donde se realizaban las inscripciones. Según el Ayuntamiento, se gestionaron más de 1.900.
Aunque se encontraban en la fila presencial, muchos de los presentes intentaban acceder a la web desde sus teléfonos y tablets, con la intención de ahorrarse las horas que les quedaban por delante. Otros acudían directamente a la oficina sin plantearse la opción telemática. «Llevo seis años apuntando a mis hijos de manera física y, aunque siempre he tenido que hacer cola, nunca ha sido tan larga como este año. Llevo aquí varias horas y posiblemente me quede sin plaza», explicaba Javier Elcoro.
En la oficina del Instituto Municipal de Deportes (IMD) dos personas atendían a los usuarios. Para realizar las inscripciones, apuntaban los datos a mano en diferentes folios correspondientes a las múltiples actividades. Una vez ocupadas las plazas, el resto de los usuarios pasaban a una lista de espera. Los que tuvieron suerte de conseguir plaza en el campus que querían tienen 48 horas para realizar el pago. Si no lo hacen, su plaza pasará al primero en la lista de espera.
Cristina Tirnauca
A medida que las actividades se quedaban sin plaza, el avance de la cola se ralentizaba por las explicaciones que los trabajadores ofrecían a los padres que necesitaban asesoramiento sobre las actividades con vacantes. «Me parece increíble que haya tan pocos trabajadores en el primer día del plazo. Si hubiera más no se habría formado una cola tan larga. Es la primera vez que vengo presencialmente, otros años lo he resuelto a través de internet», explicaba Rosalim Chanca que, después de un par de horas, pensaba apuntar a su hijo a cualquier actividad si su primera opción se quedaba sin plazas.
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El horario de atención al público comenzó a las ocho y media de la mañana. Sin embargo, una hora antes ya podía observarse una hilera de personas de más de 50 metros de largo. «He intentado hacerlo por la web pero estaba saturada, me parece normal porque hay muchísima más gente que el año pasado», reconocía en la cola Margot Pelayo, que llegó a las siete y media de la mañana y fue atendida tres horas después. «El año que viene tendré que madrugar más, porque no he conseguido reservar las actividades que más me interesaban: los campus multiaventura y multideporte».
Aunque una pequeña carpa cubría a las personas más cercanas al edificio, gran parte de los presentes se encontraban a la intemperie. La lluvia dio tregua en torno a las diez de la mañana. «¿Agobiado? Ha dejado de llover y me han traído un café, no tengo queja», comentaba Alejandro Vázquez mientras cogía el vaso que le acercaba un compañero de la fila. «Este año hay más gente que nunca, pero no aumentan el número de personas que atienden las peticiones. Lo peor es que muchos de los que estamos aquí deberíamos estar en el trabajo».
Este dato lo confirmaron dos mujeres que salían apuradas después de realizar la inscripción. «Tenemos mucha prisa, deberíamos estar ya trabajando. Tienen que encontrar una solución porque no es normal que todos los años vengamos con mucha antelación e igualmente lleguemos tarde a nuestro puesto», se quejaba una de ellas mientras andaba a paso ligero hacia su coche.
Algunos de los presentes se mostraban aún más críticos con la gestión de las inscripciones. «Me parece increíble que en el siglo en el que estamos no podamos hacer esto por internet. Se nos llena la boca de 'smart city' y tecnología, pero aquí estamos perdiendo toda la mañana en una cola», exclamaba Jesús Fernández, apoyado por el aplauso de las personas que le rodeaban.
Alejandro Vázquez
El Ayuntamiento informó más tarde de que a lo largo de la mañana se habían gestionado más de 1.900 inscripciones, 1.700 en las tres primeras horas, a través de las diferentes modalidades disponibles: presencial, a través de la web, por email y por teléfono. Desde el Consistorio destacaron que para agilizar el proceso «se ha mejorado» la aplicación de inscripción online, que ha estado funcionando «durante toda la mañana sin incidencias». Frente a las quejas de los usuarios, el Ayuntamiento achaca la demora y el bloqueo de la inscripción online al volumen de tráfico que se acumuló en las primeras horas. Aunque algunas personas no pudieron acceder en ningún momento, otros notaron que la página iba más fluida en torno al mediodía.
Con motivo de la apertura del periodo de inscripciones, el IMD había reforzado el personal de atención en sus oficinas con dos puestos presenciales, dos destinados a ayudar en la tramitación de inscripciones online y personal adicional realizando tareas de información y consultas telefónicas. Aunque el refuerzo no evitó las colas interminables ni las quejas de los ciudadanos.
Javier Elcoro
No es la primera vez que el inicio del plazo de inscripciones para las actividades de verano congrega a cientos de personas en torno a las oficinas del IMD. En años anteriores, las colas también se demoraron durante varias horas. Mientras en 2017 se estimó que las esperas rondaban la hora y media, varias personas aseguran que esta vez llegaron a esperar cuatro.
Desde el PSOE han denunciado el «fracaso» del sistema para inscribirse y han criticado que la alcaldesa «presuma» de que la ciudad es una 'smart city' a la vez que pide «menos anuncios, menos propaganda y más inversión para actualizar los servicios municipales». También Ciudadanos ha querido pronunciarse: «Se trata de una de las actividades más demandadas de la ciudad en época estival», explicó su coordinador, Marcos Gutiérrez. Un motivo por el que «un amplio número de demandantes se ve obligado a permanecer durante horas en la puerta para inscribir a los menores debido a que no se habilita correctamente la inscripción online».
Rosalim Chanca
Las inscripciones siguen abiertas y todavía quedan plazas disponibles en varias actividades. De manera presencial, pueden realizarse en las oficinas de la piscina municipal del complejo deportivo de La Albericia, de lunes a viernes, en horario de 8.30 a 14.30 y de 18.00 a 20.00 horas. También puede llevarse a cabo a través de la página web que, una vez superadas las primeras horas de la mañana, ha vuelto a funcionar con normalidad. Las primeras actividades en agotarse han sido los campus multiaventura, hípica, tiro con arco, bádminton y surf. En total, se han ofertado 3.679 plazas para 90 actividades que comenzarán el 2 de julio y terminarán el 21 de septiembre.
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