Un proceso judicial impide demoler la ruinosa plaza de abastos

Aunque cada día que pasa el estado del edificio que albergó la plaza de abastos de Los Corrales de Buelna es más peligroso, el Ayuntamiento tiene las manos atadas, al estar pendiente de una resolución judicial que decida qué hacer con él. Cada vez son más las voces que piden una actuación inmediata que no pasa por otra cosa que su demolición, pero no acaba de resolverse el conflicto judicial interpuesto por los comerciantes que ejercían en ese mercado tras recibir la orden de desalojo.

La última de esa voces ha sido la del portavoz regionalista, Miguel Mediavilla, interesado en saber si se ha elaborado un informe que determine el grado de peligrosidad del edificio. La alcaldesa, Mercedes Toribio (PP), ha respondido asegurando que los servicios técnicos municipales «han considerado mejor no inmiscuirse» en un tema que está pendiente de juicio. Y nadie sabe con qué fecha se ha elaborado el informe pericial sobre el estado del inmueble, ni los resultados de ese estudio técnico.

Pero mientras, el edificio sigue deteriorándose a ojos vista, para peligro de cuantas personas transitan por la zona, en pleno centro del casco urbano. Para evitar males mayores el Ayuntamiento ha vallado el lugar. Algo que también ha sido motivo de preocupación. Mediavilla ha solicitado fijar al suelo las vallas, para evitar que puedan moverse, y hacerlas más consistentes, para que los niños que juegan en esa zona no puedan entrar en el perímetro de seguridad. Toribio ha contestado que se está estudiando por los servicios técnicos la fijación de las vallas actuales.

El último informe técnico que consta en el Ayuntamiento tiene fecha de 14 de enero de 2009. Ya entonces se afirmaba que su situación era de «ruina técnica», mostrando «graves deficiencias en su estructura».

Antes, en septiembre de 2008, el derrumbe de parte del techo obligó a tomar la decisión de desalojar a los cinco comercios que aún ocupaban el inmueble.