Soba rinde homenaje al sacerdote Antonio López, desde ayer su Hijo Adoptivo

Don Antonio López Madrazo tiene la fortuna de dar misa en una de las iglesias más bonitas de Cantabria, la que se encuentra en mitad del pueblo de Rozas, en el municipio de Soba. Tiene esa suerte y otra más grande que es la de ser muy querido por todos los vecinos del valle que, ayer, le rindieron un homenaje. Será por esos 49 años que lleva de cura en el ahora llamado Equipo Pastoral de Ramales y Soba.

Entre 400 y 500 personas se reunieron Rozas para rendir homenaje a su cura. Además, el Ayuntamiento, le nombró Hijo Adoptivo del Valle, todo un honor para un santoñés de pro que lleva toda su vida sacerdotal en Soba.

Hubo, como no podía ser de otra manera, una misa y después una comida en la plaza del pueblo, donde se repartió casi medio millar de raciones de paella.

Don Antonio se ha caracterizado en todos estos años por su labor en el arreglo de las iglesias del valle y su vinculación con el sector ganadero. De hecho, figura como uno de los fundadores de la Sociedad Agraria Alto Asón, una de las más importantes de la región.