El Convento San Ildefonso de Bareyo no podrá ser rehabilitado

El alcalde de Bareyo, José de la Hoz ha mostrado su «desilusión» por no poder llevar a cabo uno de los proyectos, a su entender, más importantes para el municipio como era la rehabilitación del Convento San Ildefonso de Ajo. En la última sesión plenaria, los concejales del PP y el del PSOE votaron en contra de la aprobación del convenio suscrito por el alcalde con el Obispado para poder disponer de los terrenos por un periodo de 50 años.

Con esta decisión, el Consistorio ha perdido la inversión de 200.000 euros que la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte iba a destinar para esta obra. De la Hoz ha explicado que contaba con el pleno apoyo de Marcano para ejecutar este proyecto que consistía en la rehabilitación de los 300 metros cuadrados de la Casa del Fundador de dos plantas para albergar un Centro de Interpretación del Camino de Santiago de la costa oriental de Cantabria, así como un centro de ocio. Previamente a esta obra, ya se ha restaurado la parte central de la Iglesia y estaba prevista una tercera fase para recuperar el claustro donde se llevarán a cabo labores de limpieza y desbroce.

De la hoz ha criticado que con la actitud adoptada por los populares y el edil socialista se haya perdido una obra «beneficiosa» para los vecinos del barrio. Ha lamentado que los concejales de la oposición se muevan por intereses políticos partidistas en vez de colaborar por el bienestar de los vecinos. «Solamente se preocupan de oponerse por oponerse a todas las ideas que se presentan, sobre todo cuando no afectan a las arcas municipales».

Cambio de idea

El regidor ha explicado que este proyecto se presentó en el mes de marzo y entonces sí contó con el beneplácito del socialista, Roberto Pellón. Sin embargo, ahora, lo ha rechazado. El edificio del Convento San Ildefonso es una joya arquitectónica que, en la actualidad se encuentra en estado ruinas. «Su rehabilitación sólo sería posible con una inversión pública pero ahora no se podrá llevar a cabo por el capricho de algunos gobernantes».