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INTERNACIONAL

El antiislamismo anida en Escandinavia

P. B.

Lunes, 20 de septiembre 2010, 02:01

Los discursos ultranacionalistas y contra la inmigración también han llegado a tierras nórdicas. La irrupción del partido Demócratas de Suecia, abiertamente xenófobo, en el Parlamento de Estocolmo es, simplemente, un paso similar al que ya vivieron otros países nórdicos como Noruega, Dinamarca y Finlandia. La larga tradición de acogida escandinava, cuyos sistemas de protección social son de los más generosos del mundo gracias al alto grado impositivo que soporta su ciudadanía, se tambalea con la crisis económica.

Pequeños partidos con discursos nacionalistas contra la inmigración cosechan triunfos y avances electorales en casi todos los países de la gélida región. Noruega se encuentra a la cabeza del ránking de la caverna, gracias a la fuerza que ha logrado somatizar el Fremskrittspartiet (FRP) -cuya paradójica tradición es Partido del Progreso-, que en las legislativas de septiembre del 2009 logró el 22,9% de los votos y 41 escaños. A punto estuvieron de dibujar un escenario que tenía horrorizados a muchos súbditos del rey Harald V y que se plasmaba en un Gobierno liderado por un partido ultranacionalista. A última hora, en el sprint final, la coalición de centroizquierda encabezada por la socialdemocracia de Stoltenberg logró la reelección y lo impidió.

Pero el Fremskrittspartiet es la segunda fuerza y su pintoresca líder, Siv Jenssen, utiliza la Cámara para lanzar hirientes críticas a los musulmanes residentes en Noruega y habla de la «islamización progresiva» de su territorio. Uno de sus objetivos es el cierre de los centros de recepción de refugiados.

Igual acento exhibe el Dansk Folkeparti o Partido del Pueblo Danés, que en las generales de 2007, sumó el 13,8% de los votos y 25 diputados para convertirse en un miembro con peso del establishment político de Copenhague y que desborda con medidas delirantes para combatir la inmigración.

El lenguaje antiislamista y eurófobo repetido por Timo Soini, líder del partido ultranacionalista finlandés Verdaderos Finlandeses, es similar. En las elecciones parlamentarias de 2003, este partido logró tres escaños en el Parlamento y en las legislativas del 2007 obtuvo el 4,1% de los votos y cinco diputados.

Quedaba indemne Suecia. Pero desde ayer su Parlamento también ha caído en manos del fundamentalismo. Ha vuelto a germinar aquella vieja y venenosa semilla que a comienzos de los noventa había depositado en sus gradas el fugaz paso de la formación populista Nueva Democracia.

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