El bálsamo leonés del Adelma

Necesitaba ganar y qué mejor sitio que su propia casa para hacerlo. El Adelma Sinfin había presentado el partido, horas antes del comienzo, como difícil, ante un equipo con grandes jugadores, con nombres como Cabanas o Montoro, al parecer el futuro del balonmano español. Sin embargo, el Ademar León fue el bálsamo que necesitaban los cántabros para sumar los dos primeros puntos de la competición y, de paso, dar una alegría a sus aficionados en el comienzo de la temporada.

Tan sólo hasta el ecuador de la primera parte los leoneses estuvieron dentro del partido, para irse diluyendo desde entonces y fundirse ante la mayor potencia y calidad del Adelma. Para ello, tuvo el conjunto de Juan Domínguez que afianzarse primero en defensa, la línea con más problemas en el comienzo del choque. Luego, gracias a los buenos contraataques de los locales, en su mayoría llevados de la mano de Reñones, uno de los destacados del encuentro, llegaron los frutos ansiados.

Tampoco el 5-1 que plantearon los leoneses fue acertado. La táctica a veces falla, como es el caso. Así, el Ademar León se las vio y deseó para parar a la primera línea cántabra, que entró al área con comodidad, con Ezequiel bien apoyado por Kobic y Kabolius.

En la segunda parte, los cántabros optaron por la relajación y tan sólo precisaron mantener la diferencia en el marcador para no pasar apuros. Bien la defensa y bien el ataque, no hubo problemas mayores con el filial leonés.

Tan sólo al final, cuando el entrenador local decidió sacar a la pista a los no habituales, el Ademar consiguió acortar las diferencias y maquillar el marcador, que terminó en el luminoso con ocho tantos de diferencia para los cántabros.

El parón de Todos los Santos afecta también al Adelma que dentro de dos semanas se desplazará a Huesca para enfrentarse al segundo de la tabla. Partido difícil pero que se afronta con la satisfacción de la primera victoria.