Árboles y farolas ocupan el nuevo carril bici de Guarnizo

Hace dos semanas se abrió un nuevo tramo del circuito de carril bici que el Ayuntamiento de El Astillero está construyendo en torno al municipio, gracias a una subvención de la Consejería de Medio Ambiente. La nueva sección, de 1.000 metros de longitud, cubre el camino entre el primer faro del Polígono Industrial de Guarnizo y El Crucero de Boo. Aunque el sendero recorre una parte de zona verde, el problema surge cuando llega a la zona de viviendas de la calle Sainz y Trevilla. Allí, el carril bici se convierte en un peligro para ciclistas y peatones debido a una construcción deficiente.

Deficiencias

La ausencia de una zona peatonal junto al carril obliga a los vecinos a salir desde sus casas directamente a la zona destinada al paso de bicicletas, con el peligro que ello conlleva. Y al mismo tiempo, los árboles y farolas que se sitúan en el interior del carril bici representan una gran amenaza para cualquiera que se aventure a recorrer pedaleando esta nueva zona de la senda costera, a su paso por la calle Sainz y Trevilla.

Con esta actuación se ha cubierto ya un 80% del circuito de ocho kilómetros que rodeará el municipio de El Astillero, pero los vecinos lamentan que en casos como éste no se haya respetado la voluntad inicial del Consistorio de mantener la convivencia entre peatones y ciclistas. En el proyecto inicial se detalló que habría espacios delimitados y diferenciados en base al color -el rojo para bicicletas y el verde para peatones- para que ambos tipos de usuarios pudieran recorrer la senda costera de forma segura. Pero por lo que parece, ni unos ni otros podrán transitar por esta nueva zona sin arriesgarse a sufrir un percance.