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Una mujer y un hombre, cacheados en el aeropuerto de Denver. :: AP
La revuelta de los escáneres pasa su prueba de fuego
INTERNACIONAL

La revuelta de los escáneres pasa su prueba de fuego

EE UU teme un caos en los aeropuertos por las protestas contra los nuevos controles de seguridad en el día de mayor tráfico aéreo

MERCEDES GALLEGO CORRESPONSAL

Miércoles, 24 de noviembre 2010, 01:12

¿Cuán cabreados están los estadounidenses con las nuevas medidas de seguridad en los aeropuertos? La respuesta se sabrá hoy cuando 24 millones de viajeros atraviesen los controles para cenar mañana con sus familias en el Día de Acción de Gracias.

Para el día de más tráfico aéreo del año se ha convocado la revuelta de los aeropuertos. Con el eslogan de 'Di no' al escáner de cuerpo entero, que se empezó a utilizar el día 1 en 69 aeródromos de EE UU, quienes se resisten a entregar al Gobierno su intimidad en nombre de la seguridad antiterrorista esperan generar suficiente ruido como para que el Congreso intervenga. «Queremos que cuando las familias se sienten alrededor de la mesa para comer el pavo hablen de su experiencia, de qué es un registro razonable, de cuán agresivo será el cacheo que permitiremos en algunas partes de nuestro cuerpo y el de nuestros hijos, y cuánta más intimidad vamos a entregar a cambio de volar», dice la página web que promueve la revuelta.

Detrás se encuentra Brian Sodegren, que se define como «un ciudadano corriente preocupado por lo que está pasando». Todos los pasajeros tienen derecho a rechazar el escáner que toma una fotografía al desnudo, sin cabello y algo distorsionada, que se puede recomponer fácilmente con un poco de photoshop. En teoría esas imágenes no quedan archivadas, pero en la práctica cientos de miles lo han sido, junto con la original que permite identificar al pasajero. Además, está la polémica de las radiaciones que emiten. Según el Gobierno equivale a cuatro minutos en el aire, pero muchos científicos creen que es más perjudicial que una radiografía, desaconsejada para niños, ancianos y pacientes de cáncer.

Tras recibir numerosas preguntas de mujeres, 'The New York Times' planteó la siguiente cuestión a la Agencia de Seguridad en el Transporte (TSA): «¿Revelan los escáneres la presencia de compresas o tampones sanitarios?». La respuesta fue sí. Y en tal caso, «¿requiere eso que se le palpe con un cacheo físico?», preguntó el rotativo. «TSA no supo contestar, dice que es a discreción de los agentes».

Cacheos brutales

Quienes se nieguen al escáner no podrán evitar el intrusivo cacheo que incluye palpar pechos y genitales «sin cambiar de guantes después de cada asalto sexual -observó el foro AR15- porque los guantes no están ahí para protegernos a nosotros, sino a ellos». A Tom Sawyer, de 61 años, le rompieron el sello de la bolsa de orina que lleva desde su operación de cáncer, a pesar de que el hombre rogó al agente de que tuviera cuidado. «No se disculparon, actuaron como si no lo hubieran visto. Humillado, enfadado y mojado, tuve que atravesar así el aeropuerto y sentarme en el avión hasta que pude limpiarme», relató. A Cathy Bossy, una azafata operada de cáncer de mama, le obligaron a mostrar su prótesis.

Desde que un pasajero de San Diego colgó en Internet su altercado con los agentes de seguridad muchos llevan a cabo su propio acto de resistencia civil, sometiéndose en público a los humillantes cacheos para que todo el mundo a su alrededor se sienta violentado. Pero el director de TSA, Joe Pistole, declaró que «una vez a bordo a todos les parece bien que el resto haya pasado por un exhaustivo control de seguridad mientras no sea él mismo».

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