

Secciones
Servicios
Destacamos
FERNANDO DE LA IGLESIA
Martes, 7 de junio 2011, 17:40
El Ayuntamiento de Reocín, un municipio de 8.200 habitantes con un presupuesto de 8,7 millones de euros, tiene impagadas 3.373 facturas de sus proveedores, que le reclaman exactamente, 3.861.008,06 euros. Constructores, fontaneros, electricistas, mecánicos, transportistas, joyeros, pintores, hosteleros, coristas, periodistas, publicistas, albañiles, cerrajeros, ferreteros, comerciantes o artistas aparecen en una extensísima lista de impagados que encabezan las grandes compañías de teléfono, de agua, de gas o de luz.
El 'cañón' es de tal magnitud que la interventora municipal ha reconocido que la administración local está «en suspensión de pagos» y advertido con meridiana claridad de las consecuencias inmediatas: «la iliquidez, patente en la tesorería, y el engrosamiento de los acreedores a corto plazo».
El último análisis que de la situación económica del Ayuntamiento de Reocín ha realizado la interventora es desolador. «La diferencia del activo circulante (la suma de los deudores, las inversiones temporales y la tesorería) y el pasivo circulante (la suma de las deudas y los acreedores a corto plazo) es de unos tres millones de euros», lo cual significa que, a corto plazo, «el Ayuntamiento no tiene suficientes recursos para satisfacer las obligaciones contraídas».
De la crítica situación económica en la que se encuentra la administración local de Reocín dan prueba el estado actual de la liquidez inmediata y la solvencia a corto plazo. Sobre lo primero, la interventora asegura que la tesorería municipal «sólo tiene un 3% de los fondos necesarios para pagar a los acreedores». Y sobre lo segundo, la supervisora afirma que «los fondos de la tesorería municipal más los derechos pendientes de cobro -eso suponiendo que se cobraran todos- sólo significan un 30% respecto al total de los acreedores».
El informe, en el que la interventora recalca la necesidad de adoptar «medidas drásticas» de reducción de gastos e incremento de ingresos, también hace una observación sobre el periodo medio de pago derivado de la iliquidez del Ayuntamiento de Reocín: 158,93 días. Ese es, cinco meses, casi medio año, el tiempo que un proveedor tiene que esperar a cobrar el servicio que hubiera prestado.
3.373 facturas
No es el caso de Andrés Ruiz Careaga, el primero de una kilométrica lista de proveedores con los que el Ayuntamiento tenía una o más cuentas pendientes a 31 de marzo, que es cuando se cerró el informe. Se le deben 847,44 euros de varios 'lunchs' que sirvió a la Escuela de Bolos en 2003.
Por diferentes conceptos y distintas cantidades, como esa hay otras 3.372 facturas pendientes de pago desde 2004 hasta 2011, aunque la mayoría de ellas se corresponden con servicios recibidos entre 2007 y 2011.
La factura de mayor importe (98.661,25 euros) se adeuda a la Dirección General de Obras Hidráulicas en concepto de la tasa de abastecimiento de agua del tercer trimestre de 2010, aunque el Ayuntamiento debe una cantidad similar (98.150 euros) a la empresa constructora Ascán por los trabajos de asfaltado de los accesos a la localidad de La Soloba. Por el contrario, la factura de menor cuantía (1,65) se debe a 'Armando Álvarez S.A.' por la adquisición de 10 tirafondos para el belén municipal.
Por lo elevado de las cantidades llaman la atención, también, otras facturas a las que el Ayuntamiento de Reocín no podría hacer frente por el estado actual de su caja. Por ejemplo, las que tiene pendientes de cobrarse el propietario de 'Vicente Producciones Artísticas'. El Consistorio le debe 78.470 euros por la actuación de las orquestas en las fiestas de San Miguel de 2010; otros 14.964 por diversas actuaciones en las casas de la cultura de Puente San Miguel y Villapresente; 11.741 más por la actuación del grupo Tanea (y otros conceptos) en julio del año pasado; otros 10.030 por la actuación de la banda de gaitas La Montaña en el Día de las Instituciones de 2010; y 17.464 euros más por organizar en Reocín el 'show de Susana'. Juntas las facturas son 135.000 del ala.
Las deudas festivas también alcanzan de lleno a 'Paellas Gigantes Vicente Quintana S.L.', empresa a la que el Ayuntamiento de Reocín no ha pagado sendas facturas de 11.812,80 y 6.120,40 euros por la elaboración de 2.400 raciones de paella y sus correspondientes complementos (no especificados) en el Día de las Instituciones.
Las balas de la Policía
Por no pagar, el Ayuntamiento, que tampoco ha abonado la prestación de servicios tan elementales como el gas, la luz o el teléfono -adeuda importantes cantidades a Naturgás, a E.on Energía o a Telefónica, compañías de las que tiene no menos de 200 facturas pendientes- no ha pagado ni las 20 cajas de balas que adquirió para sus policías en la 'Armería Serafín', a la que debe 358 euros por ellas.
Ni los 155 croissants que encargó para el desayuno de unos campamentos a la tahona 'San Miguel' (68 euros). Ni los libros adquiridos -Mortadelo y Filemón, entre otros- a ediciones Montañesas se supone que para la biblioteca (936 euros). Ni las 20 entradas que se ha reservado en los últimos años para la Corrida de la Beneficiencia (1.260). Ni las bisagras de la Casa de Cultura (28,37)... Por no pagar, el Ayuntamiento no ha pagado ni el bocadillo de tortilla que encargó al restaurante La Ermita (8,20) para dar de comer a un mendigo.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.