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IRENE BAJO
Domingo, 11 de septiembre 2011, 10:22
En tercer encierro de las fiestas patronales de la Virgen Niña de Ampuero se saldó ayer con un herido por asta de toro en el glúteo, siendo ésta la asistencia más importante que han tenido que atender los servicios sanitarios de DYA, tanto en el encierro de ayer, como en el resto de jornadas desde que comenzaran las fiestas patronales el pasado miércoles.
El corredor, natural de Logroño, de 44 años y miembro de la Asociación de Corredores, Aficionados y Recortadores de Toros de España (ACARTE), fue embestido por un novillo en el trayecto de ida, e inmediatamente fue atendido por la UVI del dispositivo sanitario en el mismo lugar de la cogida, a la altura del estanco. Posteriormente fue trasladado el hospital de Laredo por la UVI. Otro hombre, vecino de Ramales de 39 años, tuvo que recibir atención médica al ser empujado por un novillo en el retorno de las reses. Fue tratado por contusiones y no precisó traslado al centro hospitalario.
En total, fueron siete las asistencias prestadas por los servicios sanitarios en el encierro de ayer, cinco de ellas por heridas leves como contusiones y golpes y los dos corredores alcanzados por los astados.
El nivel de participación se vio incrementado en el primer encierro del fin de semana, es por ello que 'Wizo', desde la megafonía, insistía en pedir la colaboración de los espectadores para que dejaran el vallado libre a los corredores y saliesen del recorrido las personas que no iban a participar. Con la tercera bomba salió la manada de La Nogalera, que hizo el trayecto de ida linealmente con uno de los novillos adelantado a los cabestros y en la retaguardia, algo más separado del resto, un cabestro. Aproximadamente a la altura del estanco fue cogido el corredor riojano, que fue empitonado en el glúteo. A la vuelta una manada más reagrupada por los pastores realizó el retorno a la plaza de toros embistiendo uno de los astados a uno de los mozos al que empujó contra la puerta frente al dispositivo médico.
Segunda novillada
Ayer tuvo lugar la segunda novillada de los festejos, que dejó un único trofeo que fue para Alejandro Parralo, sustituto del novillero Daniel Morales, alcanzado por un astado el pasado jueves. El novillero echó arrojo en la arena y ofreció dos faenas diferenciadas, más precisa la primera, en la que poco a poco se fue ganando al novillo y al público, para abatir a la res de dos estocadas que le valieron el apéndice del animal en la que fue la primera corrida de la tarde. En su segunda ocasión agradó con la capa, luchando por lucir la faena con muchos adornos, pero no fue certero con el acero, ya que tras la tercera estocada el animal fue descabellado. Francisco Montiel no tuvo una buena tarde con ninguna de las faenas que realizó. Se alargó mucho la muerte de los dos adversarios por la inseguridad del novillero, matando el primero de la tercera estocada, mientras que en el último toro le clavó el acero en cuatro ocasiones y el astado tuvo que ser descabellado.
Fin de fiestas
Hoy, domingo, los ampuerenses vivirán un fin de fiestas relativo, pues aun queda por delante la festividad de La Bien Aparecida, con el último encierro.
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