La Peña Gajano, en peligro

Tras un cuarto de siglo de historia, la Peña Bolística Gajano Hermanos de la Torre Roiz está próxima a su disolución. El Ayuntamiento obliga a abandonar la única fuente de ingresos con que cuentan: su sede social. En lo deportivo gozan de una salud de hierro tras permanecer este año en Primera Categoría con el presupuesto más bajo de todos los equipos. Para el año que viene habían planteado una temporada ilusionante con la continuidad de Fernando de la Hoz y Raúl Pérez, junto a los fichajes de David Cianca y de los juveniles Samuel y Raúl Fernández.

El empeño de la Directiva presidida por José Manuel Portilla de continuar luchando el año que viene con dignidad en la División de Plata bolística se derrumbó como un castillo de naipes hace una semana, debido a que el Ayuntamiento de Marina de Cudeyo les informaba a través de una misiva de que debían de abandonar su sede en el plazo de 15 días hábiles, por incumplimiento del convenio firmado entre ambas partes, en 1988.

Todo ha cambiado con el nuevo gobierno municipal del PP presidido por Federico Aja, pues con los anteriores ediles nunca hubo ningún problema en este sentido y siempre apoyaron al club en lo que pudieron. Hay que decir que en esta sede social la peña tiene un bar con el que consigue gran parte de su presupuesto anual, por lo que si le cierran su sustento al conjunto de Gajano no le queda otro remedio que disolverse. Este establecimiento lo llevan en usufructo varios directivos que satisfacen un alquiler a la peña, siendo éste el dinero real con que cuenta la entidad, pues las subvenciones municipales hace dos años que no las cobran.

El presidente de la peña entiende que «la situación económica en el municipio sea mala y que a todos nos toca apretarnos el cinturón, pero en nuestra sede nos encargamos de satisfacer los gastos de luz, agua. que generamos todos los meses. Lo único que no pagamos es el IBI y ya hemos comunicado al consistorio que nos haríamos cargo de él».

José Manuel Portilla se mostró «dispuesto a dialogar con el Ayuntamiento para solucionar esta situación. Deseo que ellos también se sienten con nosotros y lo podamos solucionar porque si no supondría echar el cierre a nuestra peña por la que hemos luchado tanto todo este tiempo». No quiso despedirse sin explicar que: «Intentaremos agotar todos nuestros recursos luchando para seguir vivos y jugando a los bolos».