Borrar
Foto: Pablo Hojas
«La creatividad se contagia, es pegajosa»
Ouka Leele | Artista visual

«La creatividad se contagia, es pegajosa»

Premio Nacional de Fotografía, participa esta semana en el taller Polientes Foto en el que realizará «ante y con los alumnos» la imagen de una Magdalena penitente

MARTA SAN MIGUEL

Lunes, 9 de enero 2012, 09:52

Ouka Leele (Madrid, 1957) visitó Polientes por primera vez el pasado diciembre. Le pareció un lugar «lleno de misterio». De hecho, lo define como «una especie Avalon por descubrir». Lo hará otra vez esta semana junto a medio centenar de fotógrafos con los que participará en la séptima edición del taller Polientes Foto, que dirige Pablo Hojas. En su intervención realizará una imagen «ante y con los alumnos». En su mente tiene visualizada la obra, pero será el martes y el miércoles, durante el transcurso del taller que este año se dedica a 'La luz azul', cuando recree en una fotografía una «Magdalena penitente». Misticismo con una de las creadoras más poliédricas e inclasificables para esta edición del taller, que arranca hoy lunes.

-No es la primera vez que participa en un taller de fotografía, ¿qué aporta de nuevo el formato de Polientes Foto?

-Algo muy excitante y que me atrae mucho: voy a realizar ante y con los alumnos una imagen que ya tengo visualizada, una nueva obra, una Magdalena penitente... y no tan penitente, ya que sabe que ha conocido al Amor. En otros talleres he improvisado simulacros de fotos pero en esta ocasión ha de ser una foto real. Que las musas nos acompañen y que las fuerzas de la naturaleza nos sean propicias.

- Los alumnos podrán intervenir con usted, una constante en su trayectoria contar con otras personas para sus obras bien en performances, fotografías o pinturas... El creador no es un ser tan solitario como parece

-Sí, el creador es un ser solitario, pero se refiere a alguien que vive en su interior y, llega un momento en que sabes estar a solas aunque estés dentro de una marabunta. Los alumnos en esta ocasión van a ser espectadores aprendices, modelos, ayudantes... Me encanta saber que hay mucha gente pues todos pueden acabar interviniendo en la fotografía, yo nunca sé a dónde voy a llegar. Parto de una idea a la que llamo la semilla, y a partir de ahí me dejo llevar. Y cuanto más hay a mi alrededor, más posibilidades tengo. Por qué no una Magdalena, sola ante el sarcófago del Amor resucitado, rodeada de la humanidad anhelante de apoyar y conocer la parte femenina del Amor. Puede que todos los alumnos acaben formando parte de la foto. Me gusta que sea una Magdalena pues Santander para mí, tiene mucho que ver con el Palacio de la Magdalena, es un pequeño guiño. Además de que me gusta mucho trabajar en lo que significa María Magdalena.

-Va y viene de una disciplina artística a otra, todo es cuestión de imagen supongo

-Sólo hago imágenes, podría decir que sí, ya que cuando escribo me encanta crear imágenes también («en el principio fue el verbo y el verbo estaba junto a Dios...») Pero con la palabra, también lo que se crean son flechas directas al corazón. Hay una forma de comunicarse, una forma de aprender y de entender que nada tiene que ver con una sucesión de palabras, una explicación llena de lógica. Se trata más bien de una iluminación instantánea que le puede ocurrir a una persona que lee lo mismo que otras pero que estas, en cambio, no se enteran de nada. Es un misterio. Una obra de arte recuerda a esa iluminación, la imita o lo pretende, lo mágico es cuando a más de una persona le ocurre. Me gustan todas las disciplinas artísticas y las utilizo en la medida de mi capacidad y de mi llamada hacia ellas, la fotografía claramente me utiliza a mí, yo he intentado huir de ella, pero no me deja escapar.

-¿Cree que existe una necesidad de encasillarla en una disciplina? Y si es así, ¿a qué cree que se debe?

-Uf, la gente tiende a encasillar, yo no soporto que me llamen fotógrafa, es como si me llamaran pantalón porque llevo pantalones algunas veces cuando trabajo. Mi obra está impregnada de todo y tiene que ver con muchas más cosas que sólo con la fotografía, preferiría que me llamaran admiradora de la creación, o mejor que no me definieran. Mi trabajo tiene más que ver con el amor, qué me iban a llamar, ¿adamando? Me resulta muy difícil cuando tengo que rellenar esas casillas donde pone profesión, no encuentro la definición para lo que en realidad, verdaderamente hago.

-Otra constante es encajar la creación en generaciones. Usted está vinculada a la Movida madrileña, acostumbrada a participar en encuentros con jóvenes artistas, ¿se atrevería a definir el movimiento creador que rezuma en la actualidad la imagen?

-Yo he crecido junto a mi generación y lo agradezco, ya que estar cerca de gente creativa es un lujo. La creatividad se transmite, se contagia, es pegajosa y es la manera de aprender, no se puede explicar con palabras, no se puede aprender con muchas preguntas, el proceso creativo hay que vivirlo y nada mejor que estando cerca de artistas. Con respecto a lo de la Movida... a veces me pasa estar en un sitio y veo alguien que le da un codazo a otro diciendo, «Mira, esa era de los 80, de la Movida», y me parto de risa, parece que me hubiera quedado momificada; bueno, quizás sirva para no envejecer, o no cumplir años...

-La actualidad la marca el nuevo gobierno, donde la cartera de Educación ha absorbido la de Cultura... ¿qué lectura hace de esta maniobra?

-Espero que la actualidad no la marquen los gobiernos, vaya aburrimiento, o vaya miedo, los gobiernos están constituidos por gestores de la actualidad y no al revés, pues si no suena un poco dictatorial. No sé si juntar cultura, deporte y educación sirva para algo, yo no acabo de entenderlo, ¿quizás para que parezca un ahorro en época de crisis? Si esto es en detrimento de la cultura, me parece horrible. No obstante, la cultura está en manos de los que la hacen y mientras sigamos activos, seguirá habiendo cultura. Imagínate un mundo en el que no hubiera forma de exponer las obras de arte, de música, de teatro... Buscaríamos la forma de hacerlo. Lo que no podemos hacer es pensar que tenemos que depender sólo de subvenciones y ministerios. Tenemos que ser creativos y libres para seguir haciendo arte y dárselo a los demás y hay muchas maneras de hacerlo.

-¿Qué reflexión le merece el término cultura?

-«El pájaro vuela, el pez nada, el ser humano aprende». Creo que es una frase de John Holt. La cultura es nuestro alimento, nuestra carne, lo que nos constituye. Lo que nos mantiene vivos y lo que nos hace avanzar y ser mejores. La cultura nos ha de devolver al verdadero ser humano.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes «La creatividad se contagia, es pegajosa»