Polémica eliminación del Laredo

El Laredo fue mejor que su adversarios, pero el colegiado del partido se cargó lo que pudo haber sido una fiesta para el conjunto pejino al alargar, sin justificación alguna, nueve minutos más un partido que no había registrado ningún parón fuera de lo normal. Durante este tiempo añadido por el colegiado, concretamente en el minuto 97, el Pobla de Mafumet logró el gol del empate, que suponía la eliminación del Laredo de esta fase de ascenso a Segunda B y por lo tanto el pase del conjunto catalán a la siguiente ronda. Esta circunstancia enfureció a muchos aficionados locales, lo que provocó algún incidente sin importancia al final del encuentro, como el salto de un espontáneo al campo o los gritos en contra de un árbitro que salió del campo protegido por la Guardia Civil.

El Laredo se despide así de esta forma tan dolorosa de una fase de ascenso en la que había depositado muchas esperanzas y tras dos partidos en los que ha superado a su rival en juego.

En el inicio de la primera parte, el Laredo se vio sorprendido por el equipo catalán, que se presentó en los campos de San Lorenzo sin la intención de especular, sino todos lo contrario, con ganas de lograr algún gol que certificase matemáticamente su pase a la siguiente ronda.

El conjunto que prepara Víctor Gutiérrez, en los primeros compases tuvo buenas ocasiones, pero no tuvo puntería. La mejor la tuvo Chema, que tras recoger un rebote de la zaga visitante, con un potente disparo, puso a prueba los reflejos del meta Sergio, que en una gran estirada evitó el que pudo haber sido el primer gol de la tarde. A partir de ese momento el filial del Nastic estiró aun más sus líneas en busca de un gol, sobre todo en jugadas por las bandas, en las que su jugador más vertical, Oribe, puso en jaque a la defensa en más de una ocasión.

La primera oportunidad clara de los catalanes llegó al filo de la media hora de juego, con una acción por la banda de Oribe, que llegando al centro del área hizo intervenir a David. A renglón seguido, el 'Charles' dio la réplica con un tiro de Chema, que tras tocar en un defensa salió a córner. A falta de cinco minutos para la conclusión de la primera mitad, de nuevo Oribe, con un disparo desde la frontal, puso a flor de piel los nervios de los seguidores locales, pero su disparo salió rozando la escuadra.

Tras el descanso el Laredo salió a por todas, sabiendo que el tiempo se le acababa y que no le valía otro resultado que no fuese la victoria, por eso los pupilos de Víctor Gutiérrez llegaron con constancia al área visitante, pero todos sus esfuerzos morían a pies de la defensa del Pobla de Mafumet.

En esta segunda parte, el colegiado vizcaíno tomo el protagonismo del choque, que estaba siendo guante blanco, y expulsó por doble amonestación a Salcines, sin motivos aparentes para ello. Cuando peor lo estaba pasando el conjunto laredano, un centro de Chema desde el interior del área, sirvió para que Sergio, tras una espectacular chilena, alojase el balón en la meta del conjunto catalán y lograron el gol con el que podía soñar con seguir en la fase. Los tarraconenses, con la eliminatoria cuesta arriba, se vieron obligados a realizar cambios, pero tampoco resultaron ya que se encontraron con un conjunto local que defendía con uñas y dientes el gol logrado por su goleador Sergio. En estos últimos minutos de juego, surgió la figura del cancerbero local, David, que abortó todas las acciones peligrosas del conjunto visitante. En los últimos compases del partido, el colegiado volvió a ser el negativo protagonista del choque, lo que provocó que el publico local increpara sus decisiones. Cuando ya pasaban siete minutos del tiempo reglamentario llegó el gol visitante, tras un saque de esquina, en el que Aleix Coch cabeceó al fondo de las mallas pejinas, rompiendo todas las ilusiones de los aficionados.

Al final el colegiado tuvo que salir escoltado por la Guardia Civil, mientras los aficionados locales expresaban su amargura por la eliminación. Cuando el árbitro se metió en el vestuario, los seguidores del 'Charles' brindaron un emotivo homenaje a sus jugadores en el campo.