Borrar
Dos ambulancias permanecen estacionadas en la zona de llegadas del aeropuerto de Moscú. :: dm
Limusinas de la Cruz Roja
SOCIEDAD

Limusinas de la Cruz Roja

Adinerados rusos camuflan sus coches de lujo como transportes sanitarios para evitar el insufrible tráfico de Moscú

RAFAEL MAÑUECO CORRESPONSAL

Lunes, 22 de abril 2013, 02:04

Moscú sigue siendo la ciudad con más multimillonarios del mundo, por delante incluso de Nueva York. Es, además, la cuarta del planeta en densidad de tráfico, sólo por detrás de Pekín, Ciudad de México y Johannesburgo. Pero como la mayoría de los adinerados rusos no tienen el privilegio de poder circular en automóviles dotados de sirena y luces especiales de prioridad, como los reservados a altos cargos, policía, bomberos y ambulancias, se las tienen que apañar para poder llegar a tiempo a sus citas.

Para ello, se ha ideado un método realmente efectivo, pero ilegal. Consiste en utilizar ambulancias y moverse a través de las colapsadas avenidas moscovitas igual que el pez en el agua.

Al principio se hacían pasar por enfermos, burlando así cualquier posible comprobación de la Policía. Pero, con el tiempo, al cerciorarse de que los controles no eran demasiado severos, decidieron deshacerse de las camillas, las botellas de oxígeno y el botiquín. Las ambulancias empleadas como taxi equiparon su interior para procurar un viaje más confortable. Según los anuncios colgados en Internet de quienes ofrecen estos servicios, hay incluso furgones para clientes VIP con bar, pantalla de cine, cómodos asientos y amenidades diversas. Todo ello garantizando, además, un rápido traslado al módico precio de 6.000 rublos (150 euros) la hora.

Todo esto lo relata el diario 'Izvestia' en un reciente artículo aparecido poco después de que los ocupantes de una de estas falsas ambulancias fueran sorprendidos in fraganti por agentes de tráfico. El rotativo ruso cuenta que, durante una verificación rutinaria de la documentación del conductor, que levantó sospechas por su «aspecto» y por su «extraña forma de conducir», los agentes se quedaron estupefactos al constatar que en el interior del supuesto furgón sanitario no había ningún paciente, sino varios sujetos muy bien trajeados y en actitud arrogante ocupando un lujoso habitáculo. Al parecer, se negaron a identificarse y a dar explicaciones.

Así que toda la responsabilidad recayó sobre el chófer, al que le fue retirado el permiso para trabajar en ambulancias. A raíz de lo sucedido y tras una inspección exhaustiva de las firmas que ofrecían en Internet, estas limusinas camufladas, el Ayuntamiento ha ordenado efectuar batidas intermitentes en las calles capitalinas para acabar con estas irregularidades.

En las últimas semanas han sido multadas varias decenas de conductores de ambulancia, que, en la mayoría de los casos, se quejan de ser ellos los cabezas de turco de un negocio que tiene muchos más beneficiarios. Lo cierto es que los anuncios de este tipo de transporte han desaparecido y ahora es necesario contactar directamente con los chóferes en el número de teléfono 03, el utilizado para solicitar traslados urgentes a centros sanitarios.

Algunos de estos trabajadores, pese a los riesgos, parece que continúan dispuestos a ganarse un dinero adicional. En este caso, se trata de ambulancias auténticas, no de las que incluyen equipamiento de lujo. Viacheslav Lisakov, líder de una asociación automovilística, confirma que, efectivamente, esta práctica ilícita está muy extendida en Rusia. Según Lisakov, se hace principalmente una vez terminada la jornada laboral, cuando, de camino al garaje para dejar el vehículo hasta el próximo turno, se aprovecha para hacer algún recorrido.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes Limusinas de la Cruz Roja