Pirelli nos lleva a 1986 con Antonia Dell'Atte

Se puede interpretar como un guiño nostálgico para celebrar los 50 años del calendario. O, si nos ponemos suspicaces, también podemos pensar que es una maniobra maestra para ahorrarse la millonada de contratar a un fotógrafo y un montón de modelos, que son gremios aún más caros que los fontaneros. El caso es que Pirelli ha logrado sorprender con su calendario para 2014, y esta vez no es una frase hecha: han decidido rescatar unas fotos del mítico Helmut Newton, que iban a ilustrar la edición de 1986, pero jamás llegaron a usarse.

Resulta chocante que se desaprovechase el material de Newton, el fotógrafo de las mujeres desnudas y los zapatos de tacón: a su condición de artista esencial del siglo pasado, se suma el fácil encaje entre su estética y la intención del calendario, que viene a ser una sublimación del clásico almanaque de taller mecánico. Pero es que aquel calendario de 1986 acabó convirtiéndose en un lío. La rama italiana de Pirelli encargó el trabajo a Newton, mientras la sección inglesa hacía lo propio con Bert Stern, y para colmo el primero tuvo que abandonar la tarea a medio hacer y dejar que la concluyesen sus asistentes. Al final, se utilizaron las fotos de Stern y se guardaron las de Newton, como «reliquia familiar».

Hasta ahora. Nueve años después de la muerte del creador germano-australiano, aquellas imágenes tomadas en Montecarlo y Chianti salen por fin a la luz. Al verlas nos damos cuenta de que a Newton no le pusieron las cosas fáciles, porque le exigieron que cada foto mostrase, además de la imprescindible chica, un producto Pirelli, así que aparecen coches, bicis, gasolineras y hasta un columpio de rueda. Y, de pronto, en julio nos topamos con una cara conocida: Antonia Dell'Atte, imagen de Armani por aquel entonces, luce pierna y perfil patricio junto a un soberbio deportivo. Al fondo, un paisano con una carretilla contempla la escena embobado, y seguro que no es por la fascinación ante los neumáticos Pirelli.