La gente perdida (y original) de Antonia Cruz

Encontramos la madriguera de Antonia Cruz en el barrio de Malasaña, en Madrid; una zona única para quien desee alejarse de los clichés y entrar de lleno en un ambiente diferente, en el que mandan la frescura y las nuevas propuestas.

'Lost People Shop' es el nombre con el que esta diseñadora -con más de diez años de experiencia a sus espaldas- coronó a un espacio que no sólo persigue vender ropa. El 'taller' de Antonia Cruz sirve de escaparate para los que empiezan, jóvenes diseñadores que encuentran en la tienda de Malasaña una forma de hacer llegar sus propuestas a unos clientes que, ante todo, consumen originalidad.

Pero no tenemos que irnos tan lejos para acceder a las creaciones de Cruz; si hay quien compara el barrio de Malasaña con Candem Town (Londres), tan sólo es cuestión de echarle imaginación al asunto para transformar lo poco que queda del casco histórico de Santander -como las calles del Medio y del Arrabal- en un Barrio Alto lisboeta en miniatura. Mucha miniatura, pero con la misma esencia mágica.

Exclusividad

Antonia Cruz se define como autodidacta, ya que lo que en un principio guió sus pasos no tiene nada que ver con el mundo de la moda; sin embargo, hoy en día tiene ante sí un futuro prometedor entre telas y patrones, gracias a su privilegiada forma de entender la ropa sobre el cuerpo de la mujer y a una cuidada selección de materiales.

Y es que de Antonia y sus diseños se pueden decir muchas cosas, pero una de las palabras que mejor define al conjunto de sus colecciones es 'exclusividad'. Telas diferentes -que Cruz se molesta en rebuscar allá donde le lleven sus pies de viajera convencida-; su negativa a adquirir los materiales al por mayor; cortes originales a precios asequibles; y diseños que, difícilmente, podremos encontrar en la calle, dan forma al 'Universo Antonia Cruz'.

En la calle del Medio

La diseñadora confiesa que no sueña con que una modelo famosa pase sus creaciones; al contrario, asegura que «lo que me gusta es que la gente de a pie use mi ropa para eventos especiales». Vestidos voluminosos, telas con estampados irresistibles y grandes dosis de feminidad también accesibles para las santanderinas, que pueden descansar del 'ruido' de la moda en un oasis para los ojos: 'Pepita Pulgarcita'. Se trata de la tienda elegida por Antonia Cruz en la capital de Cantabria para darse a conocer. Sin ir más lejos, en la céntrica calle del Medio.

El estilo de Antonia Cruz es original y transgresor. Ropa muy urbana cortada para aquellas mujeres que, según la diseñadora, «no quieren pasar desapercibidas». Debido a que se confiesa seguidora de «ninguna tendencia», a esta 'buceadora de telas' le motiva el diseño de moda por cuanto le haga «sentir especial, con estilo propio y que marque la diferencia».

«Lo que más me gusta de estar dentro de este mundo es tener mi propia tienda y ayudar a introducirse a los nuevos talentos», afirma Cruz, que, hoy en día, trabaja en 'Lost People Shop' como diseñadora, apoyada por Andrea, «que también diseña collares», y Gisele, «que es cantante y posee su propio grupo».

Antonia dice que, entre sus metas como diseñadora, «vivir de ello y que me proporcione la posibilidad de viajar y conocer» son algunas de ellas. Así es que Cruz hunde sus manos en el costurero tanto como se escapa de viaje por el mundo, siempre aprendiendo más y captando más y más detalles que, posteriormente, quedarán plasmados en sus colecciones.

El proceso creativo de Antonia Cruz tiene mucho que ver con las telas, que son el ingrediente principal con el que, ya en los fogones, elaborará la sabrosa receta. «Primero me hago con la tela» -cuenta Antonia- «y más tarde ideo qué hacer con ella».

Las telas y la calle. De sus viajes la diseñadora vuelve oxigenada y con las retinas cargadas de buenas ideas. «Prefiero viajar y ver cómo viste la gente y mezclar prendas, estilos e ideas», comenta la creadora, que no se marca límites y se fija en «cómo viste desde la persona más clásica a la más vanguardista».

Apuesta

La calle del Medio es un placer para los sentidos del visitante. Lástima que el placer dure tan poco O, al menos, eso es lo que debió pensar Antonia Cruz la primera vez que su mochila de caminante le llevó hasta 'Pepita Pulgarcita', el rincón de la ciudad al que confió sus vestidos de princesa, sus faldas globo o sus camisetas de inspiración 'punk'.

Tanto 'Lost People Shop' como 'Pepita Pulgarcita' comparten una misma pasión, que se ciñe al contorno de los jóvenes creadores en un 90-60-90 nada convencional. Desde 'Lost People Shop', según Antonia, «yo intento ofrecer la ayuda que me ofrecieron y apuesto por el diseño de las futuras promesas emergentes, las presento en la ciudad (Madrid) y en las ciudades donde aparecen tiendas de nuestro perfil, como 'Pepita Pulgarcita'».

Entre los diseñadores que promueve 'Lost people Shop' es posible encontrar en Santander el trabajo de Antonia Cruz (Madrid), Miuky (Tolousse, Francia), Azpeleta y Martínez y Fashionpool (Barcelona), Mar Rodríguez y Belén Peña (Madrid) y Andrea López (Andújar).

Imaginación, estilo y 'glam' para una mujer que, como Antonia, no duda en retocarse el 'rouge' en el espejo retrovisor o en reconocerse adicta a las cremas hidratantes y las compras exóticas, siempre y cuando el fin sea sentirse lo más especial posible.